Capítulo 38

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Luke Patterson ha sido fotografiado con la modelo Canadiense Alaska Anderson a la salida de un restaurante.

La estrella de la banda Sunset Curve ha sido visto este viernes con la joven Anderson, ambos se veían cómodamente hablando ¿será que nace un nuevo romance?

Suelto mi celular dejandolo caer contra el escritorio. En estos momentos estoy sintiendo nauseas y mi estómago revuelto, como si mis nervios estuvieran haciendo de las suyas allí.
No puedo terminar de leer esa noticia, se siente como si me hubieran dado una patada directa al rostro. Incluso las fotos me dan un golpe directo.

Me molesta, demasiado.

Es decir, Luke y yo no hemos terminado, desde que nuestros caminos tomaron otros rumbos y nuestras vidas se separaron, lo único que dimos a entender fue que nos tomariamos un tiempo.
Pero al parecer, para él no ha sido así.

Froto mis sienes y cierro mis ojos. El dolor de cabeza me está aniquilando lentamente desde que me desperté esta mañana. Estos últimos días han sido difíciles para mí y no estoy descansando como corresponde ya que me quedo hasta tarde frente a la pantalla de mi laptop esforzándome en terminar los miles y miles de  documentos que llegan todos los días. Esto no es para mí, siento que estoy a nada de tocar fondo.

Hasta mi humor va cambiando todos los días. Por ejemplo, hoy me encuentro irritable y ni siquiera tengo excusa alguna para atribuirle a mi estado de ánimo. O tal vez sí.

Ina Sokolov. La hija del multimillonario Nikolay, el hombre que patrocinará nuestra nueva marca de maquillaje, no ha dejado de atormentarme. No le ha gustado ningún producto que hemos diseñado en tan solo ¡dos meses! En tan poco tiempo tuvimos que correr de un lado al otro, agotar recursos, crear diseños y sacar ideas de donde no teníamos para poder hacer nuestro mejor trabajo. Sin embargo, la pequeña rubia ha rechazado las tres propuestas y calificado el trabajo de la empresa como "flojo y sin inspiración". Lo entendería si todo lo que presentamos fuera un desastre como esas láminas que se hacían un día antes de presentar un trabajo grupal frente a la profesora y para el cual no se había estudiado absolutamente nada.
Ina es arrogante y envidiosa, tiene aires de superioridad como si fuera una superestrella. Poco nos falta para tomarnos de los mechones y sacudirnos en el suelo hasta que alguna gane, no doy el primer paso por respeto a mi apellido, no quiero mancharlo y crear un caos.

Me levanto del asiento y salgo de mi oficina. Observo a mi secretaria que está tecleando algo en su teclado de la computadora y aclaro mi garganta para llamar su atención.

Se levanta rápidamente observandome.

—Dígame.

—¿Puedes conseguir algo para el dolor de cabeza? Siento que se me partirá a la mitad—suspiro.

Incluso mis energías parecen haber sido consumidas por algún ente invisible.

—Por supuesto—parece recordar algo y comienza a buscar en los cajones de su escritorio. Froto mi sien, tratando de eliminar la presión que siento en ese lugar. Finalmente ella toma una tableta con pastillas redondas y se apresura en acercarse a mí—estas son muy efectivas. Déjame que voy a buscar un vaso de agua.

Asiento levemente y quito la pastilla de su envoltorio para luego dejarla sobre la palma de mi mano. A los segundos cuando por fin tengo el agua me la tomo y vuelvo a mi oficina, esperando que pronto se pase el dolor.

Iridescence | Julie and the Phantoms✔Donde viven las historias. Descúbrelo ahora