NO ACEPTO

Capitulo 5

"Recuerdos IV"

'Sugar, sugar...'

Adrien

¿Nervioso?, para nada.

Se lo que hice, lo que estoy haciendo y lo que le estoy proponiendo a mi novia.

Muerde su lapicero anaranjado unos segundos.

—¿está era mi sorpresa?—su pregunta a logrado que me remueva en mi lugar—yo esperaba chocolates, pero una propuesta de matrimonio... es una sorpresa muy grande.

—entonces quieres otra sorp—su grito me interrumpe—

—dámelo!!!—ella corre unos pasos hacia mi y logra quitarme el anillo—pónmelo... por favor—me sonríe y cuando lo hago enreda sus manos en mi cuello—

—entonces...

—es un Si a todo!!!—sella sus labios con los míos—

***

Marinette acaba de tener una loca idea y yo todo idiotizado dije si a su propuesta, el taxi que nos lleva al registro civil está en medio de la avenida desde hace unos cinco minutos, la veo a ella a mi lado, sin dejar de sonreír, no sé cómo tuvo tiempo de cambiarse lleva un vestido que...

—jamás había visto ese vestido

—nunca me lo puse, ¿es exagerado?, ¿es muy corto?

—si a ti te gusta a mi me gusta—sonríe—los autos no avanzan Adrien y si no lo hacen puede que desista de mi decisión

Se que exagera pero de todas formas le seguiré el juego.

—no dejaré que eso pase—salgo del taxi y abro la puerta de su lado tomo su mano para sacarla de allí y le pago al taxista la mitad de lo acordado—nosotros—la levanto en mis brazos y empiezo a caminar así con ella—vamos a unir nuestras vidas—me besa la mejilla, varias personas nos ven, algunas nos reconocen por nuestro trabajo pero no dicen nada solo se limitan a sacarnos fotos—antes de que te arrepientas

—no iba a arrepentirme y tampoco quiero que te canses

—¿qué dices?, si no pesas nada—le hago dar unos pequeños saltos en mis brazos, a pesar de ser tan alta menos unos centímetros que yo es soportable su peso—

—¿vas a caminar así lo que reste del camino?

—así no te escaparás de mi

Luego de unos largos minutos caminando encontramos el lugar la bajo y ella me limpia el sudor de la frente y la gente no aparta su vista de nosotros.
Aún así tomo su mano sigo con la respiración agitada y entramos buscando la oficina que nos indicaron.

—hola venimos a casarnos—es lo primero que dice mi novia—

—felicidades... llenen estos formularios por la mesa de allá—y necesitarán de su testigo

—¿testigo?

—si no hay problema—Marinette me arrastra de la mano hasta la mesa—ya tenemos testigo Adrien

—¿de quién estás hablando?

—tuve que re programar mi vuelo para más tarde—su voz hace que me de la vuelta—

—¿Shuang?

—fuiste rápido e inteligente Adrien—asiento y empiezo a llenar todos los datos, cuando estamos listos somos dirigidos a una oficina algo exageradamente adornada—

—¿así que no creen en Dios?

—suponemos que usted no señor, por estar aquí formalizando alianzas civiles—el señor decide callar con las palabras de mi novia—