esclavo perfecto

Cap 32

Luego varias horas y muchos intentos Daniel se encontraba tendido en el piso, agotado y con su cuerpo lleno de sudor frío pedía internamente que su "entrenamiento" terminará. Su cuello dolía más que nunca.

-ya casi lo logras pequeño-dice James mirándolo con diversión -te dije que no me detendría hasta estar satisfecho, no me importa quedarme aquí toda la noche

El chico se reincorpora y mira al mayor. De pronto el pitido de su collar vuelve a sonar y abre mas los ojos gateando hasta lo pies de su ahora amo. Al fin había podido llegar hasta el antes de la descarga, sintio el alivio recorriendo tu alma.

-bien hecho perrito -dice acariciando la cabeza del rubio mientras este se aferraba a su pierna negándose a separarse, pues tenía miedo de que si se apartaba un poco la descarga lo volvería a azotar - es todo por hoy, vamos a que descanses.

James toma la cadena del chico y comienza a jalarlo hasta el zotano donde vuelve a atarlo al aro de la pared para luego salir sin decir nada más.

Daniel se acuesta en el piso tratando de sobar un poco su lastimado cuello, no tarda mucho en caer dormido pues el cansancio lo dominaba.

~Al día siguiente~

El ruido de la puerta abriéndose hace que pequeño se despierte asustado y se retraiga en el mismo lugar.
James baja con un plato en sus manos como el día anterior, lo deja en el suelo y las tripas del pequeño suenan.

-si quieres comer ya sabes que hacer-baja sus pantalones y boxers hasta quedar con su miembro descubierto.

Daniel suspira y se acerca gateando al mayor, era humillante pero era más su hambre.

Abre su boca y lentamente mete el miembro en ella comenzando a chupar.

-ah...se nota que tienes experiencia puta- dice tomando al menor de su cabello haciendo que llegue más profundo.

Luego de unos minutos se corre en su boca y se la tapa para que no pueda escupirlo

-a partir de ahora cada que me corra deberás tragalo, de lo contrario te castigare ¿entendiste? -el menor asiente temeroso y lo traga- bien hecho.

Lo suelta y también suelta su cadena.

-veamos los frutos de tu entrenamiento de ayer- el pitido suena y Daniel gatea hasta su amo antes de la descarga con temor-bien hecho, ahora come

Se sienta en una silla cercana esperando a que el pequeño terminará, este se acerca a su plato y comienza a comer rápidamente sin usar las manos como anteriormente le habian ordenado.

Al terminar se queda sentado en el piso con la mirada baja esperando a que el mayor hablara.

-continuaremos con tu entrenamiento- se levanta de la silla y comienza a caminar la puerta.

De pronto el pitido del collar vuelve a sonar, esto hace que Daniel gateara rápidamente lleno de terror hasta su ahora amo.

La respiración del rubio estaba acelerada y con sus manos se aferraba a la pierna de James.

-buen chico -dice acariando su cabeza como si de un perro realmente se tratase -vamos.

Salen de aquella habitación y se dirigen a un cuarto en el cual Daniel no había entrado antes.

Al abrir la puerta de este se deja ver una cama matrimonial con sábanas rojas de seda, base de madera negra, se veía muy elegante.
Cortinas grandes de un rojo oscuro, lo cual hacía que casi nada de luz exterior entrará en la habitación.

Mientras Daniel miraba todo tratando de entender lo que pasaría james cierra la puerta y toma al pequeño fuertemente por la nuca y lo avienta hacia la cama.

-veremos que tanto resistes antes de romperte-una sonrisa tétrica hace que Daniel se estremezca.

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Gracias por leer^^
No he actualizado por que la verdad es que no he tenido la motivación para escribir.
Comenten que tal les pareció el capítulo por favor, para saber si sigo llevando la historia por este curso o lo cambio
((: