35 Mi propia amenaza

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Me encontraba haciendo nada, Harry me había comprado un abrigo de piel para aguantar este frío que creo y ya no tarda en congelarme, el se había tomado el día libre para estar conmigo, según esto “Para asegurarse de que no arriesgara mi vida” Estaba sentada en uno de sus sofás mientras observaba a Chris que conversaba con Harry. Me gustaba este lugar,  a pesar de lo frío o lo caro que tiene cada rincón,  me gustaba porque no es un lugar cualquiera. Es lo que él mismo ha creado.

—¿Te gusta? —Pregunto sonriendo una vez que ya se habían retirado todos.

—Es un lugar muy bueno Harry—Sonreí —pero ¿Qué pasara cuando tengas hijos? ¿No crees que a tu esposa le gustaría algo más hogareño?

—Ya pensaré en ello —Frunció el ceño—Cuando me casé por su puesto—Aclaró—Addy…

—Descuida Harry—Dije negando— sé que todo esto pasará y cuando lo haga, encontrare a alguien que comparta su vida con la mía, tal vez no fuiste el momento adecuado, tal vez tu destino no es conmigo, por lo tanto tienes el camino libre—Sonreí—Aunque yo podría aceptar que conocieras y besaras a alguien más, el que tocaras a otra mujer porque es solo físico y que tus labios no se desgastaran por besarla porque tu cuerpo no va a desaparecer, pero Harry si tu llegaras a sentir amor por alguien más créeme que aun me dolería..Aun me dueles—Dije sacando de mí ese sentimiento que he tenido guardado desde que volví. Posiblemente él si me quisiera más ni él mismo lo sabía, pero lo cierto era que tenía una habilidad especial para herirme.

—Addy en verdad no encuentro palabras más que  “Perdón” —Dijo haciendo énfasis e hiso una pausa. Su expresión decayó de una desesperada a una fría, ¿Qué era lo qué él pensaba?—Aun recuerdo él día en que te fuiste.

—Harry yo…—Trate de interrumpir.

—Descuida, fue mi culpa—Negó levemente—Mientras la besaba estaba pensando claramente en ti, y supongo que tú no me vas a creer eso ¿O sí? —Dijo pero no respondí, estaba helada, como olvidar aquello —Recuerdo que estaba averiguando un millón de formas para hacerte feliz y luego te fuiste, me fallaste cuando me dijiste que nunca te irías—Mientras continuaba las lagrimas comenzaban a contenerse en su rostro, no lloraría eso estaba claro. Por mi parte yo estaba asustada, no podía verlo tan mal frente a mí. Quería correr a abrazarlo pero la difícil actitud que ha tenido conmigo desde siempre me lo impidió—Me repetí a mi mismo una y otra vez que estuvo mal y a la única conclusión que llegaba era la misma…Kate—Pausó mientras suspiraba y quitaba algunas lagrimas de sus ojos con su muñeca—¿Recuerdas cuando querías saber todo de mí? Cuando tratabas de obtener información sobre mí con cualquier tontería. Cosa que jamás ocurrió porque mi información es demasiado restringida, creo que mereces saber toda la mierda por la que pasé antes de que fuera lo que soy, aun que hoy seamos más extraños que cercanos.

—Harry, no creo que debas, es algo en lo que nunca debí haber intervenido, fue sólo…

—¿Pero es algo de lo que siempre has querido saber no? —Mis mejillas se ruborizaron por lo notable que había sido todo este tiempo, pero ¿Podría escuchar todo lo que me diría? —Asentí.

—Cuando era pequeño recuerdo muy bien que era como cualquier niño, me gustaba el futbol y tenía muchos amigos—Negó sin apartar su vista de mí— Un día mi madre llego borracha sin ningún motivo, fue demasiado extraño y a mí eso me asusto, ella no solía hacerlo, era como cualquier madre que protege a sus hijos y los lleva al colegio. Después de ese día todo cambio—Suspiro—Mi Padre llegaba todos los días tarde y mi madre comenzó a embriagarse con frecuencia. Una tarde mis padres discutieron a muerte, ninguno de los dos quería estar equivocado más no se habían dado cuenta de lo que le estaban causando a su único hijo—Mientras hablaba mi mente daba vueltas…—Mi Madre un día se cansó de toda la mierda de mi padre y le pidió el divorcio. Para mí fue muy difícil, ¡Mierda! Era un niño. Mi padre al poco tiempo nos abandono y ella se hiso cargo de mí, claro que no dejo de beber y al poco tiempo comenzó con las drogas…Tuve que hacerme responsable de ella a como diera lugar, de verdad intente ayudarla por varios meses pero poco después me quitaron el trabajo, dijeron que era muy chico para eso y mi madre comenzó a golpearme, “Eres igual que tu padre” —Susurró con voz quebrada, débil—Así me decía mi madre cada vez que me ponía una mano encima—Las lagrimas comenzaron a salir en mí y las de él no tardaron, cerró los parpados con fuerza, reteniéndolas, y echo la cabeza para atrás golpeando suavemente el sofá. Tragó el nudo que subía por su garganta y suspiró una vez más—Ella me violo con otra drogadicta Addison, ella me hiso lo imperdonable—No lo soporté, aparte mi vista de la de él y me levante de inmediato, no podía creer lo que me había dicho y cuando escuche su voz quebrada en sus últimas palabras agarre mi cabeza con mis dos manos. Lo que escuche me rompió por completo. Las lágrimas caían en abundancia por mi rostro y mi pecho se sacudía fuerte por los espasmos del llanto, ¿Cómo alguien pudo haberle hecho eso a su propio hijo? ¿Cómo es que Harry se mantuvo fuerte sin derrumbarse…Mis padres jamás me hubieran tratado así, ellos nunca me pusieron una mano encima.

—No llores Addison—Dijo acercándose a mí— Tú no tienes nada que ver en esto—Dijo pero el nudo en su garganta aun seguía ahí, impidiéndole hablar del todo bien. Lo tomé por su torso y lo abrase con fuerza, el tardo en aceptarme pero en cuestión de segundos me correspondió. Lo sentía respirar con fuerza, podía notar las lagrimas salir de sus ojos…A él le dolía todavía, Harry estaba herido por todo aquello. Apoyo su mentón sobre mi cabeza y me apretó con más fuerza. Miré hacia él y pude notar como los risos caían sobre su frente, su rostro  estaba realmente pálido y podía ver claramente el cansancio en sus facciones—Henry es mi padrastro, por su puesto tengo una familia y como ya sabes…están en otro país, son lo que tengo, son lo que la vida me recompenso y estoy feliz por ello—Termino de decir pero yo ya no podía llorar, estaba tan cansada de hacerlo, estaba agotada por hacerlo continuamente. Lo abrazo con más fuerza  de la que espero y sus poderosas extremidades me aprietan contra su cuerpo. No puedo detener el latir desbocado de mi corazón. Su rostro se hunde en el hueco entre mi hombro y mi cuello, haciendo que su respiración caliente me ponga la carne de gallina. Las puntas de su cabello me hacen cosquillas en la mejilla y su aroma varonil me aturde de un modo que no soy capaz de entender—Mira lo que te he causado Addy, date cuenta de todo el dolor que te he hecho y aléjate de mí. Te prometo que vas a rehacer tu vida y yo haré la mía.

—Pero yo no…

—Si no lo haces tendré que dejarte yo Addy…Solo mírame, soy un desastre cayendo en una fosa, es tú única oportunidad de que seas feliz.

Cuando termino de decir, fue entonces cuando me di cuenta que ya no eran suficientes sus palabras, era claro que las preguntas inundaban mi mente y me atacaron como leones rugientes…que irónico lo despreciaba y lo amaba con tanta fuerza al mismo tiempo, que suerte la mía de estar enamorada de mi propia amenaza.

 —Pero lo soy contigo Harry—Dije y su mirada oscureció varios tonos—Mi corazón te pertenece desde que te conocí…Soy tuya, asfíxiame, lléname de gemidos, dame vida o quítamela, devórame, ilumíname, disfrútame, víveme en tus besos y siénteme en tus labios, mátame, condéname, acaríciame, lo que sea pero contigo.

(...)

Jajaja, Les prometo guapuras que viene el segundo clímax de la novela, ojala y les gusté.. +15 votos y continuo.

Secrets | Harry Styles.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora