нєу, ѕιℓℓу кιтту - мιηѕυηg

тωєηту тняєє

El tiempo había pasado más rápido de lo que parecía, el mes de noviembre estaba casi por terminar dando indicio a que el pequeño de cabellos azules no estaría más. Dejó un suspiro pesado escapar de sus labios para luego posar su mirada sobre su amigo, quien a pesar de tener un libro abierto frente a él no parecía estar estudiando.

—¿Todo bien?

Se acomodó un poco para quedar más cerca del menor.

—Seungmin...

Con escuchar su nombre pareció reaccionar, pestañeó dos veces rápidamente y luego negó.

—No sé, supongo que sí.

—Eso no es respuesta.

Suspiró —Es que no sé cómo sentirme, es todo...—miró al pelinegro junto a él—. No sé cómo estoy con Wooyoung, llevamos días sin hablar y cuándo lo hacemos se siente...—se quedó pensando, buscando la palabra adecuada—. Raro.

Minho lo miró apenado haciendo que ponga sus ojos en blanco.

—No raro malo, sino que parecemos solo amigos y es raro...

—¿Por qué no terminan?

Seungmin suspiró y por primera vez en todo ese rato posó sus ojos en el libro.

—No lo sé, creo que ambos estamos esperando a que uno de los dos lo haga...—susurró—. Pero ninguno lo hace, no sé qué esperamos para hacerlo.

—Creo saber qué esperas tú...

—No tiene nada que ver Changbin aquí —frunció su ceño.

—Ni lo mencioné —rio un poco el mayor.

—Cállate —gruñó—. Además, lo que sea que hubiera existido entre nosotros dos acabo el último día que nos vimos, no hay más.

—Aun así, esperas a que regrese ¿no?

El menor exhalo fuerte para luego cerrar el libro y ponerse en pie.

—¡Oye! —se quejó—. No quería molestarte Seungmin, solo estoy preocupado por ti.

—Lo sé...—le sonrío—. Pero no quiero hablar de ello ¿sí?

Minho le dio una pequeña sonrisa ganándose una de su amigo también.

—¿Te espero a la salida?

El menor asintió antes de desaparecer del lugar dejándolo totalmente solo.

—¿Está bien?

Minho dio un brinco ante la repentina voz a su alrededor, sus ojos cayeron en el menor de mejillas regordetas dejando una sonrisa torpe aparecer en su rostro.

—No lo sé del todo...—suspiró—. ¿No ibas a pasar con Beomgyu?

—No vino, tuvo que viajar con sus padres por Soobin...—dijo mientras se acomodaba junto al mayor—. ¿Puedo quedarme contigo?

El mayor asintió mientras sentía al peliazul acomodarse para recostar su cabeza en su regazo.

—El día está muy lindo ¿no?

Minho arrugó el ceño.

—Estamos como a 15° ¿Qué tiene de lindo?

—¿Prefieres el calor?

—¡Que hermoso día! —Jisung rio—. La primera nevada del año parece estar cerca...—susurró.

—¿Qué tiene de especial la primera nevada?