Dos corazones rotos necesitaban ser sanados y un par de tenis fue la razón de que sus vidas tuvieran sentido.
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Nash es un chico reservado y peculiar. Antes era el favorito de todos, el rey del mundo. Pero por un error cometido por sus padres ahor...
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Hoy todo comenzó siendo diferente desde que desperté. Me sentía algo extraño, pero no de una mala manera. Cuando desperté baje y conversé un poco con mi madre y con mi abuela, ya no me sentía tan mal al hablar con ellas.
Y cuando llegué a la preparatoria no me sentí encerrado al ver como todos pasaban a mi lado y murmuraban cosas mientras caminaba por los pasillos. Aunque no todo iba a estar bien, alguien tenía que arruinar el día y por supuesto que esa persona había sido Casper.
Lo iba a enfrentar, ya estaba por detenerme enfrente de Casper y decirle que ya me tenía harto de todas las idioteces que me había hecho hasta el momento. Estaba por ir y enfrentarlo, pero no lo hice porque las palabras que salieron de la boca de Matthew me dejaron en shock. Todas las cosas que, no solo le decía a su hijo, sino también las cosas que le escuche decir sobre mi padre.
Él sabía lo del cambio de oficial que hubo.
Él sabía quién había sido el que había testificado contra mi padre.
¿Qué carajos estaba pasando con ellos?
¿Cómo Matthew estaba enterado de las veces que los oficiales habían ido a revisar nuestra casa?
Cuando reaccioné y quise salir de allí. Matthew se dio cuenta de mi presencia y actuó como si nunca hubiera hablado mal de mi familia. Como si nunca hubiera dicho que yo era un mimado y que solo tenía lo que tenía por el dinero robado de mi padre. Que yo solo era un farsante y no tenía nada que me hiciera capitán del equipo, que su hijo era y siempre sería mejor que yo.
Sí, era de saber que la sociedad siempre seria hipócrita, te habla, quiere ser amigo tuyo y después cuando confías en esa persona, se aleja y usa todo en tu contra. Bueno, pues eso es algo que me sucedió con Casper. Él siempre se hacia el inocente por los problemas que había tenido con sus problemas, pero también sabía que Matthew tenía que ver mucho con todo esto.
La voz de Abbey me saca de mis pensamientos.
—Entonces quedamos en que nos veremos los cuatro en Coffee Central —los tres sentados delante de Abbey, asentimos con un «Sí» mientras intentamos que nadie nos escuche.
Mi cabeza quiere comprender del todo porque Matthew sabía todo eso. Mientras ellos hablaban sobre lo que haríamos hoy, yo estaba pensando en lo que había escuchado en el gimnasio.
—¿Nash, estás escuchando? —sacudí la cabeza.
—Mmm... si, lo hago —respondo teniendo la atención de los tres.
—Dime que haremos.
—Por supuesto —me quedo callado pensando en algo —. Abbey y yo iremos a hacerle la entrevista a Molly mientras ustedes nos dan tiempo para buscar lo que necesitamos.
—Bueno, sigamos —Abbey me ve con los ojos entrecerrados antes de girarse hacia Madison.
—Sí, nosotros haremos algo para hacer que Molly salga de su oficina y ustedes puedan buscar lo que necesitan.