- ¿Qué es e'te lugar? -Pregunté, confundida de por qué mi madre me estaba llevando a ese lugar en medio de la nada.
-Es una sorpresa. -Me sonrió mamá a través del retrovisor.
-Pero es muy tarde. Papá nos regañará si llegamos tarde y nos castigará.
-No digas eso, nena, no lo hará. No a ti. -Afirmó.
Mamá condujo por un tiempo más mientras que yo me estaba quedando dormida. Tiempo más tarde, noté como alguien me movía la rodilla para despertrme. Veía a mamá con esa sonrisa dulce mientras me daba un beso en la frente y yo me frotaba los ojos.
Estábamos en un descampado, rodeadas de árboles y flores. Enfrente de nosotras había un lago donde el agua estaba tan limpia que se podían ver claramente las piedras del fondo.
No se veía nada más lejano de dos metros de distancia. La oscuridad nos invadía, y, aunque fuese un lugar hermoso, estaba asustada. No me gustaba la oscuridad.
-Mamá...-Sollocé buscando apoyo de mi madre.
-Tranquila, nena, estoy contigo. Siempre lo estoy. -Me abrazó mientras encendía una pequeña linterna de gas haciendo que toda esa oscuridad desapareciese, convirtiéndola en luz.
Con esa luz se podía apreciar mejor el lugar, las flores eran coloridas y había peces nadando en el lago, sin contar alguna que otra ardilla que se acercaba a ver qué era lo que sucedía en ese lugar.
Así es como yo lo veía.
- ¿Qué hacemos aquí, mami?
-Para poder explicártelo necesito apagar la luz. ¿Vale? No te pasará nada mientras yo esté aquí, contigo.
Miré los profundos ojos verdes de mamá y asentí dudosa mientras me aferraba a su cintura con mis cortos brazos.
-Ven, acompáñame.
Yo le seguí, agarrada a su camiseta mientras que ella abría el maletero de nuestro coche 4x4.
Había una manta de cuadros perfectamente colocada, aperitivos y bebidas y también una caja larga rectangular. Cuando mamá apretó un botón, un montón de lucecitas de colores empezaron a brillar, dejándome impresionada.
-Alaaa.
- ¿Te gusta?
Asentí con una sonrisa donde me faltaban los dos dientes de abajo.
- ¿Pero, qué es eso? -Pregunté señalando a la caja de antes.
-Esto, es un telescopio. -Explicó mientras lo sacaba y montaba.
- ¿Qué es un "telecorípito" ? -Volví a preguntar, ladeando la cabeza par verle forma lógica.
-Telescopio. -Corrigió. -Sirve para ver las estrellas y, a veces, los planetas. -Me explicó mamá.
- ¿Puedo ver Júpiter con el "telecorípito? -Pregunté ilusionada.
-Hoy no, pero habrá una lluvia de estrellas que podremos ver juntas. ¿Te apetece?
- ¡Síii!
-Bien, pero primero vamos a dar una vuelta. Todavía queda un poco para que las estrellas fugaces empiecen.
Mamá encendió de nuevo la linterna de antes y me cogió a mi en brazos con una mano mientras que el la otra llevaba el cacharro para iluminar el camino. Estuvimos caminando por lo que calculé como diez minutos hasta pararnos en un gran árbol viejo. Mamá me bajó de sus brazos junto la lámpara y sacó una navaja de su bolsillo. Le miré curiosa, sin saber que iba a hacer realmente.
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Solo tú [Solitarios#1] [Completa]
Roman d'amourUna chica Dos chicos Un psiquiátrico Muchos traumas Y amor de sobra ¿Qué pasó con Ayla y París? ¿Y con Niko? ACLARACIÓN: Entiendo que no te guste la historia. Yo escribo porque a mi me entretiene y a la gente le gusta lo que escribo. Si esta histori...