Dolor Y Amor OneShots {Camus X Milo}

Él Enamorado y la muerte

Sé podía escuchar una pequeña caja de música, la cuál tenía a dos muñequitos bailando al son de la melodía.

En él sueño

Narra Camus.

Estaba soñando con aquél día, aquel hermoso día en que uniría mí vida con mí hermoso niño, podía ver perfectamente cómo bailavamos al compás de aquél vals, muy enamorados él se veía tan hermoso, su bella sonrisa iluminaba toda mí vida.

Entonces él se separó de mí y corrió hacia algún lugar, yo le seguí, mientras él seguía riendo, lo segui hasta que me ví en mí habitación, sentado en mi cama entonces ví una luz blanca, y Vi a alguien parado en frente de mí vestido de blanco con un velo que cubría su rostro mientras me daba la espalda yo creyendo que era mí amado me acerque a toda prisa y le hablé.

Camus: ¿Cómo haz entrado amor?, ¿Cómo entraste mí vida?, Si todas las puertas están cerradas, la ventanas también - él se dió la vuelta y poco a poco se quito el velo que cubría su rostro.

Xx: yo no soy tú amor - ví a un hombre súper pálido, y sus ojos azules y fríos - yo soy Hades, la muerte que por ti hoy a venido.

Camus: ¿la muerte? ¿Por mi haz venido?

Hades: - asíntio -

Camus: - se arrodilló frente a él - oh por favor, dejeme vivir un día... - Hades le extendió la mano y le dijo.

Hades: no puedo darte un día, sin embargo si puedo alargarte una hora más de vida - le dijo serio.

Fin del sueño.

Desperté respirando agitado, y sabiendo lo que tenía que hacer, sabiendo que no disponia de mucho tiempo me vesti rápidamente y a tropezones, para seguidamente por la ventana salir de mí casa eh ir en busca de mi amado, corrí lo más rápido que pude por esas calles, me salte la baranda que estaba antes de entrar a su casa y usando unas piedritas la arroje hacia su ventana, no paso mucho tiempo para que él se asomara su rostro, su hermoso rostro que siempre me borraba toda amargura recordé todo así que le hable a mí prometido.

Camus: ¡Ábreme la puerta mí amor! - le grite tratando de no llorar en frente de él.

Milo: ¿Camí...? ¿Que sucede?

Camus: por favor, ábreme la puerta y no preguntes mí amor, no hay tiempo.

Milo: ¿Pero cómo lo hago? Estás no son horas decentes de visitas cariño, mí padre no fue a la reunión del pueblo y mí madre aún no duerme - Camus tembló, sabía que no disponia del tiempo necesario.

Camus: si no me abres la puerta está noche mí amor, jamás volveré a pedirlo - Milo se asustó.

Milo: ¿Porque lo dices mí amor? - preguntó preocupado.

Camus: la muerte me está buscando Milo, ya no tengo tiempo, sólo me dió una hora para despedirme de tí - dijo con lágrimas en sus ojos.

Milo sabiendo que sus padres le habían contado que Hades él rey del Inframundo oh la muerte para muchos era él quien se encargaba de llevarse las almas de aquellas personas que habían Sido buenas, me habló sabía tenía un plan era un niño muy listo y yo sabía que estaba planeado algo, él no se quedaría de brazos cruzados, él me amaba y haría lo que fuera con tal de retenerme a su lado.

Milo: Cam... Mi vida, vete hacia la ventana, dónde yo antes cosía te lanzare un cordel de seda para que subas arriba ¿Si? Y si la seda no alcanza uniere a ella mí cabello - Camus asíntio.

Me se dirigi a aquel lugar, dónde nosotros nos conocimos aquella vez la primera vez que nos vimos, aún recuerdo cómo había venido con mis padres a visitar a nuestros nuevos vecinos y te vi cosiendo junto a tú madre un bonito mantel de seda blanco con bordados dorados simplemente hermoso, sonreí al recordar aquello en cuanto sentí que algo me cayó en la cabeza era él lazo de seda lo tomé y empeze a subir.

Milo: sube rápido mí vida - decía suplicando - toca ya la barandilla - me decía desesperadamente.

Estaba a punto de tomar su mano, estábamos a escasos centímetros de tocarnos cuándo aquella cuerda se rompió y yo empecé a caer...

Milo: ¡CAMUS!... - gritó desesperado, y debajo, en él suelo, en aquella tierra fría ví a la muerte a Hades esperándome, sólo escuché que me dijo...

Hades: vamos enamorado... La hora ya está cumplida... - dijo con voz fría para después sumirme en la oscuridad.

Narración normal.

Milo: ¡Camus! - seguía gritando, en eso su padre Écarlet había entrado algo molesto por tanto escándalo.

Écarlet: ¡Milo ¿Porque demonios gritas tanto?! - preguntó enojado, Milo no le respondió y corriendo salió, empujando bruscamente a su madre para salir corriendo de allí.

Ellos confundidos lo siguieron sólo para darse cuenta de lo que había pasado, Écarlet corrió a detener a su hijo para que no tocará él cuerpo, porque si, vivo ya no estaba, ya que debajo de la cabeza de aquél joven se hizo una gran posa de sangre espesa y roja.

Mystoria llamaba a una ambulancia mientras trataban de controlar a su hijo.

Fue una semana muy estresante, porque los padres del prometido de su hijo, le hechaban a su hijo la culpa de la muerte de su hijo y tiempo después vino una noticia que los hizo perder todo él buen razonamiento a la basura.

Tres meses después de aquella tragedia.

Milo se encontraba en él cementerio, en sus brazos un ramo de flores y su alma hecha pedazos, llegó a aquella tumba fría, puso las flores y después de secar sus lágrimas hablo.

Milo: está será la despedida amor, tenemos que irnos de aquí, tus padres me odian dicen que es mí culpa que tú hayas muerto, tal vez tengan razón, pero no puedo darme por vencido, nuestro bebé me necesita, porque si amor déjame decirte que vamos a ser papás - dijo llorando mientras acariciaba las letras de aquella lápida con una de sus manos y su vientre con la otra - mis padres me hecharon de casa al enterarse, bueno ahora tenemos que iniciar de cero, así que esto es un adiós, pero no te preocupes, le contaré a nuestro bebé sobre él buen padre que tenía...

Dijo llorando, beso una rosa blanca y la dejo sobre aquella lápida se puso de pie lloró un poco y después sonrió para después irse de allí y nunca más se volvió a saber de él...

¿Continuará?...