Dedicando con todo mi cariño a EdithQuez24 gracias por todo el apoyo <3
---------------------------------------------------------
Aarón
Ya estábamos a fuera y se seguían escuchando sus ruidos, tome la mano de Rea y la hice subir al auto. Para poner gracia a la situación conecte mi celular y puse a Rosenfeld en específico puse la de I Don't Need Your Name.
Rea estalló en risas, puse a todo volumen la canción. Parecíamos idiotas riendo por ello, haciamos chiste tontos sobre si nos hubiera pasado a nosotros, las canciones seguían y todas eran como "sensuales"; por lo que Rea me vio con el ceño fruncido.
—¿Tienes una playlist sobre música para tener sexo o algo así? — me sonroje.
A ver, es que había veces que uno tenía que entrar en calor y que mejor que estas canciones para hacerlo, obvio no las necesito con tremenda mujer que tengo por novia.
—No me digas que tu no — trate de sonar obvio.
—¡Aarón! — se carcajeo —. Dios santo, me hace falta conocerte más.
—Si quieres lo probamos — sonreí coqueto.
—Tal vez — asintió y sonrió de lado.
—¿Tal vez, ahora? — no pierdo nada intentándolo.
—Acabamos de terminar, no podré caminar contigo — negó.
—Es que eres irresistible — puse una mano en su pierna y me giré más hacia ella.
—Lo se — toma mi mano, entrelaza sus dedos por encima.
Pasamos un rato más dentro del auto escuchando y cantando las canciones, dándonos besos, platicando de bobadas y sobre el viaje que haríamos por la escuela.
—Tienes que llevarte un abrigo y te compraré tus botas para la lluvia — me acaba de confesar que no tiene unas.
—¡Ay no Aarón! — se quejó —. Tu no quieres cumplir mis caprichos, quieres volverme una malcriada.
—Te lo mereces — acaricie su mejilla —. Ya mande a construir nuestro castillo.
—No me pondré eso vestidos todos pomposos — niega repetidas veces.
—¿Por qué no princesita? — puse ojos de cachorrito.
—Me voy a bajar — esta por abrir la puerta.
—¡No! — salto sobre ella.
Se empieza a reír, me llena el alma de felicidad. Nos vemos unos segundo a los ojos y después nos comemos a besos como si nuestra vida dependiera de ello, sus manos me toma más fuerte haciendo el beso más intenso.
Ella está por sentarse en mi regazo cuando tocan la ventana de mi lado, ambos brincamos de el susto y no separamos. Nos acomodamos nuevamente, bajo el vidrio dando vista a el jefe de Rea.
—En el estacionamiento no — nos ve con reproche —. Rea toma las llaves, cierran bien él lugar yo ya me tengo que ir.
Aguarda el donde estaba antes, recuerda que hicimos cochinadas en el baño y también Carel.
—Una pregunta —comento, parece que Rea también se hace la misma pregunta.
—Claro, dime — se cruza de brazos haciendo que si brazos se vean más anchos.
Si nos escucho estamos fritos.
—Sin ser chismoso, ¿dónde estaba hace una hora? — empiezo a sudar como si hubiera corrido un maratón.
ESTÁS LEYENDO
No somos tan diferentes
RomantizmRea y Aarón, ¿por dónde empezar cuándo se trata de ellos? Si bien se sabe que todo empezó por aquel proyecto de química, jamás se esperaron que eso mismo sucediera entre ellos. Aunque quieren llevar su relación de manera amormonica y pacífica no es...