Capitulo 13 °Finlandia

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Cuartel principal. Finlandia, Helsinki.

Aaron

Nunca había tenido la oportunidad de venir al cuartel principal, pero ahora que he entrado aquí puedo aprovechar el momento. No perdí tiempo en dormir, terminé de recorrer el piso, empezando desde la madrugada. Terminando mi recorrido me quedo en el lugar donde será la reunión.

El lugar es lujoso, nada comparado con los otros cuarteles o el comando general, aunque tenemos diferentes objetivos. La mesa ovalada de color negro logra que todos estemos sentados, casi uno frente a otro. Intento no aburrirme, de lo único que han hablado ha sido sobre la remodelación, los planes, alguno que otro permiso, todo llegando a ser un fastidio.

Así que enfoco mi vista en lo único que me interesa en esta sala, sus facciones son delicadas y se acomoda el cabello suelto. Me doy cuenta de que llevo así desde hace un rato porque termina por voltearme a ver. No cambio el semblante, sigue muy cerca del ministro.

Max Amonn no está en mi lista de personas favoritas y lo sabe, pero no dará explicaciones frente a su "nieta". No cuando no quiere que se entere de nada. Hace años cuando decía ayudar, su ayuda solo era un daño en todos. Será un buen ministro para muchos, pero siempre termina por ponerse como prioridad en Gem-Elli, un desacuerdo que tuvo con Brent hace unos años aquí mismo. 

—Bueno —inquiere el ministro —el cuartel norte tendrá un cambio grande —Nina sonríe —me alegra que seas la líder.

Apoya su vieja mano en el hombro de Nina y tenso mi mandíbula, no quiero que la toque, no quiero que la vea, no quiero que ni respire en su dirección.

Me molesta aún más que ella se vea tan cómoda con él. El viejo solo es un comunista más, intentando ganar de todos sin ser él quién salga perjudicado. Algo que me hace recordar a mis padres, al dolor que se desató y la nula ayuda que tuve.

Por ello me molesta la confianza que le tiene, lo ve como su familia. Familia que ya no tengo. Dolor que no voy a demostrar.

Siguen hablando sobre las remodelaciones y se muestran los planos.

—Aquí es donde se mandarán los explosivos —señala el ministro. Me inclino viendo las zonas deshabitadas.

—Pero eso ya no incluye al cuartel, ¿es un área para desalojar? —Nina frunce el ceño al notar el punto lejos del área del cuartel.

—No será un área habitada, pero es del terreno —cierra ese tema, siguiendo con los laboratorios. Algo que le alegra a la castaña.

—Entonces se van a recibir a todos los químicos dentro de unos meses —confirma Nina, firmando las personas que van a entrar y salir del cuartel.

Intento recordar lo mayor posible, no tengo una libreta como Derek, pero prefiero que todo se quede en mi mente. Espero que pregunte sobre los detalles del cuartel sur, el momento llega, pero se termina por quedar con lo que ha descrito Nina, solamente apoyo todo lo que ha dicho sin agregar algo más.

Después de 2 horas terminan la junta, los amigos de Nina salen juntos. Me quedo esperando a que Nina se despida del ministro, llega a la puerta y empezamos a caminar por el pasillo.

—¿No tuviste nada que aportar? —pregunta mientras la miro de reojo.

—La verdad no.

Puedo sentir su leve suspiro.

—¿Te ha dicho algo sobre nosotros? —indago.

—Aún no decide qué hacer con ustedes, pero si hablo bien de ti —continua —tal vez puedas quedarte en el cuartel.

Todo por ella (1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora