Los Ryuguji

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Luego de las formalidades de la presentación, todos se dispersaron, y como mencioné antes, yo no sabía mucho de la cuarta división, de hecho nunca había cruzado palabra con los hermanos Kawata, hasta esa noche...

-"Así que eres Leah, la pequeña hermana de nuestro Draken, mucho gusto soy Smiley..."- Nahoya parece ser una persona muy amistosa, su sonrisa hace sentir que es una persona muy amable.

-"Mucho gusto, así es, soy la hermana menor de Draken, he oído hablar de ti y tu hermano, el <<demonio que se esconde detrás de una sonrisa y el ángel que se oculta bajo la ira>>, los gemelos Kawata"- La verdad esa noche dudé que fuera un demonio ese tan smiley, hasta que lo vi en acción. 

-"Sip, esos somos nosotros, Souya es un poco difícil con las mujeres, él y Hakkai tenían mucho mas miedo que tú por hoy, sabían que llegaría el momento en que tuvieran que hablar contigo... Por cierto, sé que a la mayoría de los fundadores los llamas por su nombre, entiendo que te cuesta llamarlos por sus apodos pero, te agradecería que no me digas Nahoya, sino no dudaré en romperte la cabeza".- me respondió con una gran sonrisa en la cara, fue entonces cuando entendí lo de "demonio".

-"Tranquilo...—mantuve mi cara seria sin que se diera cuenta que me tomó por sorpresa, lo aprendí de Ken—...No tendrías la oportunidad de partirme la cabeza ni aunque quisieras, a diferencia del resto yo no le tengo miedo a ninguno de ustedes..."- siempre mantuve el papel de mujer seria y firme, es una característica que los Ryuguji tenemos, realmente ante el resto podemos parecer que nada nos importa.

-"Por si no lo notaste, fue una advertencia, pero yo no repito las cosas dos veces pequeña niña..."- realmente era un demonio insoportable. 

-"¿Qué dijiste, Nahoya?—Dos segundo después la sonrisa del demonio se borró de su cara, al tercer segundo estaba en el suelo asfixiado con mi Hiza-jūji-gatame.—Como yo lo veo, no entendiste la frase si ustedes me respetan, yo los respeto.."- Si no hubiera llegado Draken a sacarme de ahí, lo dejaba inconsciente, estaba apretando para que eso sucediera,  desde ese momento, los soldados supieron que yo no estaba jugando. 

-"¡QUE DIABLOS CREES QUE HACES LEE!"- Me gritó Kenny. Realmente a todos los tomó por sorpresa mi reacción, ya que aún estaban presentes las divisiones en la reunión. 

-"Lo que hice querido hermano —le respondí con rabia y sarcasmo— es algo que tu maldito cuarto capitán pidió...¡QUE LES QUEDE CLARO A TODOS LOS PRESENTES, TANTO CAPITANES COMO SUBORDINADOS, LO ÚNICO PEQUEÑO EN MI, ES MI ESTATURA, Y LA ÚNICA PERSONA AUTORIZADA A LLAMARME DE ESA MANERA ES DRAKEN, LA PRÓXIMA PERSONA QUE ME VUELVA A TRATAR DE ESTA MANERA, DEJARÁ DE RESPIRAR EN 3 MINUTOS, ¿ENTENDIDO?!"- Hay tres cosas que realmente me hacen perder el juicio; que me traten de niña pequeña o mimada, que insulten a Ken, Emma o Manjiro, y que alguien me moleste al comer.

-"Eres un tarado hermano..."- le dijo Angry a Smiley, quién seguía sonriendo como si nada. 

-"Nosotros tendremos que conversar acerca de tus impulsos mas tarde."-Kenny estaba realmente molesto, casi nunca se enojaba conmigo porque yo realmente no daba problemas, excepto cuando peleaba con algún niño idiota, como Nahoya, por ejemplo.

Luego de eso nos fuimos a casa, Manjiro se fue con Mitsuya, y yo con mi hermano. Paramos en un mirador que queda de camino al Salón de masajes, me compró un Dorayaki , yo tenía en mi bolso dos botellas con leche que preparé esa misma mañana, sabía que si al final del día algo salía mal, me esperaba el Dorayaki del arrepentimiento,  nos sentamos y comenzó...

-"Realmente estoy muy orgulloso de ti... mi pequeña Leah"- dijo con una sonrisa en la cara

-"¿De qué hablas? ¿no vas a regañarme por literalmente asfixiar a uno de tus amigos?"-realmente no entendí a qué venía eso.

-"¿uh?, ah por lo de Smiley, nah... él se lo merecía, pero trata de no hacer ese tipo de cosas enfrente de todo el mundo, dañarás el orgullo de los capitanes si lo haces siempre"- nos echamos a reír, hacía mucho tiempo que no compartía con Ken de esta manera y realmente lo extrañaba.

-"¿Crees que Shinichiro-san este feliz con todo esto?...Sé que puede sonar egoísta de mi parte pensar en que lo extraño, sé que no era nuestro hermano pero, ¿Kenny tu no crees que él si sentía que éramos parte de su familia?"

-"Claro que él nos consideraba sus hermanos Leah lo que nos toca hacer es devolverle la mano y cuidar de Mikey y Emma, ellos siempre serán nuestra familia..."

-"Tienes razón... sobre todo Emma ¿no?..."- le sonrío de manera desafiante

-"Si es por ello, Mitsuya también es parte de esta familia... ¿o me equivoco?..."-me devolvió la sonrisa

-"Touche, pero sí, te equivocas, Mitsuya es sólo un buen amigo, no creo poder ver a los chicos como algo más..."

-"Si tu lo dices...-sonríe- en fin, tu cumpleaños se acerca, ¿crees que debamos celebrar nuestros cumpleaños juntos?"

-"hmm... siempre lo hemos hecho así, no veo porque no podemos seguir haciéndolo, además es un día de diferencia, sería ridículo si los celebramos separados nunca lo hemos hecho... Hermano yo no quiero que nos separemos nunca y lo mismo con nuestros cumpleaños."

En el Burdel, las chicas nos hacían cumpleaños sorpresas, juntaban dinero y nos compraban un pastel de naranja y chocolate, en mi cumpleaños número 5 me regalaron mi primera muñeca de trapo, y a Ken su primer Manga "Neon Genesis Evangelion", hasta la fecha guardamos dichos regalos, ninguna de ellas esta, el mundo del Burdel es cruel y cuando ya no sirves, te vas...

Leah RyūgujiDonde viven las historias. Descúbrelo ahora