-"Pero necesito que esto sea un secreto, aún nadie sabe que volveré son los primeros en saberlo...—les advertí antes de que se les ocurra decirle a alguien sobre lo que tenía planeado hacer —bueno, tengo que hablar con Takashi, nos vemos en la reunión de hoy en la noche."- me despedí con una sonrisa en la cara.
-"¡YA TE VAS A DECLARAR POR FIN PRESIDENTA!"- Gritó sin censura Peh-yan.
Sentí como el color de mi cara se volvió totalmente rojo, y sólo levante la mano y tome del cuello a Peh.
-"La próxima vez que grites ese tipo de cosas, no te salvarás de la Hiza-jūji-gatame".- me dió tanta vergüenza que luego de eso me fui sin decir una palabra.
No sabía que me avergonzaba más, el hecho de que peh haya gritado eso a todo pulmón, o que se diera cuenta antes que yo de mis sentimientos por Mitsuya. Cuando llegué al salón del club de manualidades estaba sólo él escribiendo una nota, tenía una cinta de medir que rodeaba su cuello. No veía venir a nadie por los pasillos, parecía que las chicas del taller estaban en receso, así que aproveché esta situación para poder hablar con él.
-"Pareces realmente ocupado... ¿acaso escribes esa nota para la niña que te gusta?..."- entré al salón sin avisar que estaba ahí, su expresión cambió completamente, estaba emocionado y sus ojos brillaron.
-"Leah... tú... estas aquí..."- me respondió sorprendido.
-"La verdad no, ya me morí y soy el fantasma que vendrá todos los días a visitarte...—le respondí y luego me eché a reír—Quería hablar contigo..."-cambié de actitud completamente.
-"Leah, realmente yo...—se acercó a mi y me abrazó, Takashi es de esas personas que huelen a esos perfumes de hombre que no puedes olvidar, por algún motivo hasta ahora me di cuenta—Lee realmente te extrañé..."-susurró de una manera muy tierna...
-"Tranquilo, no pienso volver a desaparecerme así de nuevo..."-le respondí el abrazo, aunque las expresiones de afecto no sean lo mío, realmente quise hacerlo.
Estoy segura que estuvimos abrazados al rededor de 5 minutos. Luego de eso escuche risas. Cuando abrí los ojos miré hacia atrás y estaban todas las niñas del club mirándonos. Nos soltamos rápidamente.
-"Takashi-san... ¿por fin se declaró?..."- preguntó una de las niñas con una sonrisa coqueta.
-"¿Eh? de qué hablas Akane-chan... yo... declararme... que cosas tan raras dices"- dijo con unas sonrisas nerviosas entremedio.
-"Señoritas, aquí no hay nada que ver... paso firme al patio, ¡hoy realizaremos yoga de costura!..—dijo una de las niñas guiñándole el ojo a Takashi—suerte...".-le susurró.
Luego de eso se retiraron todas haciéndoles señales con el pulgar a Takashi, yo me acerqué a la puerta y la cerré, no podía ser que me pase la misma situación dos veces el mismo día.
-"Bien... no sé como comenzar esto después de la situación de recién..."- le digo a Mitsuya con una cara bastante seria.
-"¿Sucede algo malo?..."-me respondió preocupado.
-"La verdad Takashi... si, y es algo terrible...—tenía que quitarle la tensión al momento de alguna manera— fui hoy a mi cita con el doctor... dijo que moriré de cáncer de próstata."- le dije bastante triste.
-"¿uh?... próstata...—pensó dos segundos y se echó a reír— tsk... siempre haces lo mismo... por poco caigo..."-respondió y noté que la situación mejoró, entonces me prepuse decirle lo que preparé de un aventón.
-"Bueno... basta de bromas estúpidas... Takashi, estos últimos días he estado pensando mucho en la conversación que tuvimos hace 10 días camino a escuela, y antes que nada, debes saber que yo suelo no entender mucho de ese tipo de situaciones hasta varios días después..."- le aclaré antes de soltar la bomba que se venía.
-"Créeme que pude notarlo...".-sonrió
-"Lo sé, soy igual de torpe que Peh-yan, e igual de insensible que Draken en ese sentido..."-necesitaba que supiera como soy emocionalmente hablando antes de decirle lo que sentía por él.
-"Leah, lo sé, nos conocemos hace mas de dos años...—me interrumpió antes de que pudiera terminar mi explicación extensa—..sé que sueles no captar indirectas, que no te gustan las demostraciones de cariño, que eres descuidada con tu falda, que al comer ensucias tu ropa, que cada vez que sonríes tus ojos desaparecen, que siempre amarras tu cabello con un lápiz cuando te concentras en algo, que amas ir al río a ver como se pone el sol... sé muchas cosas de ti... creo que casi las sé todas..."
Sólo lo escuché, y entendí que no necesitaba explicar algo más...
-"Pero no sabes, que estoy tan enamorada de ti, cómo Draken de Emma...—le respondí —..Y se que soy más como Draken que como Emma, que suelo no entender que son los celos, no capto cuando necesitas una prueba de afecto, un beso o un abrazo, de hecho jamás he besado a alguien en mi vida, ni siquiera sabía que estaba enamorada hasta que perdí la memoria... No tengo mucho que ofrecerte para la postulación a ser tu novia Takashi, pero ten la certeza que aunque no lo diga nunca, te amo con todo mi corazón...".
-"Leah... pensé que nunca dirías esto...— me respondió, le brillaban los ojos, parecía feliz y emocionado —.. tú, eres una persona especial para mi... nunca existió alguna postulación porque tu siempre haz sido la dueña de mi corazón, y aunque tu no seas una romántica expresiva, con el romance que puedo entregarte, sobra para los dos... Leah, yo siempre te he amado, desde que me advertiste en el Burdel sobre tenerme compasión, decidí que jamás estarías sola, que siempre estaría contigo y para ti, me quisieras a tu lado o no..."
Mi corazón latía a mil por hora, no podía creer que realmente eso estuviera sucediendo, tampoco creía que podía llegar a ser tan ciega.
-"Acéptame tal cual soy Takashi Mitsuya, y sé que seremos felices, sólo... acéptame."
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Leah Ryūguji
FanfictionSoy Leah Ryūguji, hermana menor de Ken Ryūguji más conocido cómo Draken, aunque suelo decirle Kenny, la vida de un par de niños criados en un prostíbulo nunca tuvo la opción de ser sencilla...