40 DÍAS •TAEKOOK•

Treinta Y Uno

Jungkook se removió al sentir su cuerpo pesado y sin energía. Poco a poco abrió los ojos, observó el ambiente donde se encontraba, sin creerlo, estaba de vuelta en su reino, en su mundo.

¿Pero como? ¿No se supone que iban a desaparecer si Taehyung y Jimin no volvían a enamorarse?

¿El destino tuvo piedad? O ¿IU encontró otra forma de regresarlos?

Extraño...

En la mente del Omega habían miles de preguntas mientras veía a lo lejos el gran castillo.

El lugar donde se encontraba era en la Puente Unión Tres Estaciones, el lugar donde todo había comenzado.

Se sentó con la poca fuerza que tenía y observó a Taehyung inconsciente a su lado, quiso ir con él pero se detuvo al escuchar sollozos. Buscó con la mirada y vió a un Jimin sentado al borde del puente, se apresuró en ponerse de pie y fue hasta él.

—Jimin _susurró al ya estar a su lado y ver como las lágrimas de su hermano caían al vacío.

— ¿puedes volver a desear?, necesito regresar... _dijo Jimin sin ver a su hermano.

A Jungkook le dolió de alguna manera aquella pregunta por que sería volver a cometer el mismo error dos veces.

— Jimin, yo... Yo no puedo hacer eso, lo siento pero no puedo.

— Jungkook nunca volveré a ver a Yoongi_ volteó en verlo con lágrimas deslizando por su rostro, se notaba que había llorado mucho por lo rojo que estaban sus cachetes_... nunca en la vida lo volveré a ver. _rompió en llanto y se lanzó a los brazos de su hermano menor.

Jungkook dejó que Jimin lloré en su pecho sin decir nada por que no sabía que decirle o que motivación darle, pero en su caso creyó que no había una buena motivación.

— mi bebé nunca conocerá a su padre _dijo de repente volviendo a romper en llanto otra vez.

— Jiminie... _dijo Taehyung quién solo hace unos segundos atrás había despertado y darse cuenta que habían vuelto.

Jungkook veía como Taehyung se acercaba a ellos y ante esto Jimin se separó de él abruptamente y fue hasta Taehyung lanzándose a sus brazos entre sollozos. Mientas que él Omega menor veía la escena desde un distancia prudencial.

— Tae Tae... Yo...no se qu-...

— shh, todo estará bien Minie... Te lo prometo, yo cuidaré de ti _dijo el Alfa abrazando al Pelinegro_ ya no llores, arruina tu hermoso rostro.

Jungkook sentía de nuevo ese vacío con el que creció y más viendo como aquellos dos parecían ignorar su presencia. Jungkook sonrió burlandose de sí mismo, por que imagino en algún momento que esto al menos cambiaría en algo pero al parecer no, ellos seguían siendo ellos.

De repente ese resentimiento vino a él queriendo gritarles a ambos que habían renunciado a ese amor que los unió una vez, apretó muy fuerte sus puños respirando entrecortado viendo a la pareja con molestia, pero se detuvo al ver aquellas Claveles Amarillos hechar humo negro y pequeñas descargas eléctricas.

— Recuerda, si sientes que no puedes controlarte solo respira y cuenta hasta 10 y podrás relajarte

Jungkook recordó aquellas palabras de su psicóloga en la terapia que estaba tomando.

— 1..2..3..4..5...6..._ respiró profundo volviendo a calmarse y viendo como aquellas flores ya no hechaban humos negros.

No podría volver a cometer ese error, no otra vez.

—Oigan _llamó él Omega recibiendo la mirada de Taehyung y Jimin_... Perdón, pero-...

— ¿es raro cierto? _dijo Taehyung limpiando las lágrimas de Jimin_... Ya no llores, estamos aquí y no hay vuelta atrás, además tu padre estará muy preocupado por ti... Tambien de ti Jungkook... _dijo sonriendo y llamando con la mano a Jungkook y este fue hasta él tomando su mano_ ¿tienen cierto acierto?