𝐿𝑖𝑓𝑒 𝑔𝑜𝑒𝑠 𝑜𝑛 ☕︎ 𝑵𝒂𝒏𝒂𝒎𝒊 𝑲𝒆𝒏𝒕𝒐 ☕︎

XIII

—¡mAMÁ MAMÁ!

La puerta de la habitación se abrió dando paso a un Yuji emocionado con una tablet en su mano.

—MAMÁ MIRA. —Gritaba mientras le mostraba una imagen a su madre.— esto es lo que quiero para mi cumpleaños.

—¿una patineta? —el niño asintió eufóricamente sacándole una sonrisa a la azabache.— bien, yo te conseguiré una, pero debes prometerme que tendrás cuidado y vas a usar el equipo de protección que tambien te voy a comprar.

—¡SÍ! ¿Crees que puedas hacer que la pinten igual que esta? 

—¿tanto te gustó SK8 the infinity? —un sonrojo se hizo presente en las mejillas del pelirosa.— bien, lo haré por ti.

el chiquillo se levantó y le dio un fuerte abrazo a la mujer lanzandola de espaldas contra la cama.

—¿puedo pedir una cosa más? —ella asintió.— ¿este año si podrías ir a mi fiesta?

auch.

Esta de hecho era una petición más complicada de lo que parecía.

—lo intentaré ¿bien? pero si no puedo ir te haremos una fiesta acá e invitaremos a tus amigos.

yuji asintió no muy seguro.

—¿quieres ir al parque? te compraré un helado. —El brillo en los ojos de la criatura fue encendido de nuevo y en un dos por tres tomo una toalla y se metió al baño para alistarse.

Por su lado Kaoru solo se colocó unos zapatos puesto a que ya tenía unos shorts de mezclilla y una sudadera.

...

—¿Después de comer puedo ir a jugar? 

—obvio. Pero ¡HEY! come con calma que tenemos mucho tiempo. —avisó la azabache acariciando la cabeza del niño y sentandose en una banca.

El tiempo que pasaban juntos Yuji y Kaoru era bastante apreciado por ambos, aunque por su puesto un poco más por la azabache que no tenía la dicha de compartir mucho tiempo que su hijo.

Por eso  a pesar de estar cansada en los fines de semana cada vez que era fin de semana de visita salian a pasear a algún lugar sin falta, incluso si solo era a comer un bocadillo para luego jugar valia completamente la pena.

—Mamá ¿no te gusta nadie? —preguntó inocentemente el niño mientras tomaba su helado.

—¿a que viene esa pregunta? Pequeñín

—Es que papá tiene una novia, entonces pensé que quizás a ti haya alguien que al menos te parezca lindo. Pero no tienes mucho amigos...

la mujer suspiro.

—No yuji, no me gusta nadie, ni tengo novio y no repitas lo ultimo, te tengo a ti asi que no necesito nada más.

—¿ni siquiera alguno de tus amigos de la oficina? ¿que hay del hombre rubio... el que no recuerdo su nombre ¡ese!

—Yuji, ya te dije que no. Mamá ya tiene a un hombre en su vida y ese eres tu. —intentó decir animada.— ahora, termina tu helado para poder ir a jugar al parque.

el niño asintió y continuó tomando tranquilo.

...

—No sé por qué acepte venir. —se lamentaba el rubio con un sombrero de rana sobre su cabeza.

—yo tampoco lo sé, pero debo aprovechar esta oportunidad. a ver, sonrie. —Dijo un gojo feliz mientras tomaba una selfie grupal.