Capitulo 28.
*Lucas
El sol me da de lleno en la cara. Suelto un gruñido y coloco mi mano en mis ojos. Me giro notando calor por todo mi cuerpo. Agacho mi mirada y la veo. Encogida, tan pequeña que me da ganas de protegerla a todas horas. Apoyada en mi pecho con sus pequeñas manos sobre mi cuello. Sonrío y suspiro mirando al techo.
Siento por dentro algo. Si, algo. Pero no sé exactamente lo que es. Dudo entre pensar si es que estoy loco por ella, muerto por sus huesos, enamorado. Yo nunca he estado enamorado. Me recorre la sangre a una velocidad brutal cuando me lo imagino.
¿Este soy yo?
No, este no soy yo.
Me gustaría decir que quiero volver a ser como antes, cuando todo era normal, cuando no tenía a nadie que me controlase, ni a nadie que me quisiera.
Pero…¿sabéis qué? no quiero. No quiero volver a ser como antes porque me he dado cuenta de que esto es mucho mejor.
Vuelvo a suspirar y giro mi cabeza hacia ella, le acaricio levemente su cuello y me responde con una pequeña risita. Río y levanta su cabeza. Tiene un ojo cerrado y el pelo despeinado. Le robo un pequeño beso y vuelve a soltar una risita.
-Buenos días preciosa. -susurro. Carraspeo ya que mi voz se corta. Ella sonríe-
-Buenos días precioso. -Me estiro, ella aún entre mis brazos- Me encanta tu voz por las mañanas
-¿Mi voz? -elevo las cejas mientras me acaricia el pecho-
-Sí, es sexy -río y ella se une a mi risa-
-¿Cómo has dormido en mi maravillosa cama? -digo riendo-
-Mhh...hubiese dormido peor sin ti, tu cama es dura como una piedra
-A si de mayor no tendrás dolor de espalda -le guiño un ojo y le robo otro pequeño beso- Me encanta como hueles
Le doy un pequeño mordisco en su cuello y empieza a reír. Podría escucharla mil vidas riendo. Le beso cada parte de su cara: su mandíbula, sus mejillas sonrojadas, su suave frente, sus pequeñas orejas, su nariz, sus labios…
-¿Qué hora es Lucas?
-Las…-miro el reloj de mi muñeca- seis y media
-Tengo que volver a mi habitación
-No, no te vayas, es muy pronto
-Sí, sí que me voy, pronto se despertarán -ríe y saca un pie de la cama. La vuelvo a meter rápidamente y me coloco encima suyo, agarrando sus dos manos a cada lado de su cabeza. Empieza a reír y la vuelvo besar, aún riendo con ella.- te has levantado contento, eh
-Siempre me levanto contento si duermes conmigo
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Princesa, ven conmigo hasta el infinito y más allá [En edición]
Novela JuvenilKiara, una adolescente con las ideas claras de que nunca se va a enamorar llega a la casa de verano de su padre junto con su nueva madrastra. Durante este verano, Lucas, un chico un año mayor que Kiara, intentará hacerle sentir esas mariposas en el...