Mutismo || Taeten [ ✓ ]

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Estúpido Taeyong y sus sucios calzones, había pasado todo el día lavando la ropa sucia de Lee y ahora se encontraba doblándola con cuidado, separando los bóxer, calcetines, calcetas, pantalones, camisas, playeras, ya está a cansado y enojado, por lo que no quería recibir ni un reclamo de ese hombre.

Cuando comenzó a subir toda la ropa a la habitación de Lee se dio cuenta de que esté se estaba bañando, así que decidió seguir con su tarea, donado alrededor de cinco vueltas para terminar de subir todo y acomodar debidamente dentro del enorme guardarropa, una vez terminado su cometido suspiro sintiéndose relajado, pero antes de poder huir de ahí un par de grandes brazos rodearon su cintura por detrás poniéndolo nervioso.

—Vaya no eres tan inútil como creí, incluso colocaste un suavizante de telas con olor bonito —Taeyong se encontraba a su espalda rodeando su cintura con ambos brazos, llevando únicamente una toalla alrededor de la cintura, su cabello aún dejaba escapar pequeñas gotas de agua debido a que había tomado un baño.

—Sí, yo, ummh... Iré a la cocina, le prometí a la señora Kim ayudarla a preparar la cena —El pequeño rubio intento liberarse, queriendo salir de ahí, pero Taeyong no lo dejaría escapar con esa escusa tan tonta.

—Ella es una chef, experta en Io que hace por eso la contraté, además quisiera quedarme a cenar en la habitación —El mayor rozó con su nariz la rubia cabellera de Chittaphon, bajando lentamente por un costado hasta su cuello, realmente ese maldito aroma a vainilla que emitía el más joven Io irritaba, era tan dulce y adictivo.

—S-sí, puedes cenar aquí, iré a decirle a la señora Kim que suba tu cena, no te preocupes —Chittaphon volvió a intentar huir de las garras de Lee, pero las cosas no eran tan fáciles como él creía; su respiración se cortó por algunos segundos cuando sintió las manos del más alto colarse por debajo de su playera acariciando su vientre hasta llegar a sus pezones.

—No me estás entendiendo Ten —Chittaphon cerró sus ojos justo cuando aquel hombre comenzó a morder y lamer suavemente su cuello logrando erizar su piel, se perdió tanto en el placer que estaba sintiendo que no se dio cuenta en qué momento su playera desapareció sobre su cabeza. —Mejor bájate los pantalones y sube a la cama.

El pequeño rubio se quedó inmóvil ante esas palabras, ¿Realmente Lee iba a hacer eso con él todas las noches? Por un minuto creyó que lo de ser su "puta personal" era una simple frase al aire, pero al parecer no era así.

Chittaphon sintió aquellos largos dedos ir directamente hacia el botón y cierre de sus pantalones a pesar de que aún se encontraba dándole la espalda a Lee.

Solamente era la segunda noche y el jefe de Wang-gug lo había arrastrado nuevamente a su cama, para poder follarlo a su antojo, ya que no solo fue una vez la que Taeyong lo penetró, pues después del segundo condón abierto realmente dejo de contar cayendo preso del placer que recibía sobre esa suave y blanca cama King size, pues a pesar de que el idiota sobre él no era suave, ni cuidadoso el placer que experimentaba era asombroso para él.