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Jaehyun había pasado toda la semana después de su mudanza tratando de consentir a Chittaphon, ya fuese con ropa, comida deliciosa o cualquier cosa que podía comprar para él; Doyoung tampoco se había quedado atrás, realmente no deseaba que su pequeño amigo se sintiera un estorbo por lo que siempre hacían tareas del hogar juntos, mientras el peli rojo le contaba historia extrañas que había vivido estando en Wang-gug, así como también procuraba cumplir uno que otro capricho a pesar de que él chico realmente no solía pedirle nada.

Yoonoh había tenido que salir aquella tarde, pues a pesar de que debían ser discretos simplemente no podía olvidar que seguía siendo un líder de Cheongug y tenía demasiadas responsabilidades que cumplir, las cuales había estado posponiendo por los recientes problemas que habían ocurrido.

—Jaehyun no volverá hasta muy noche y no tenemos nada para comer, tendré que salir al súper mercado, ¿Quieres venir? Puedo ponerte un cubrebocas y una gorra de Jae para evitar problemas. —Ten lo meditó un poco, realmente tenía ganas de salir pero ¿Y si solo le ocasionaba problemas a Doyoung?, ¿Y si los hombres de Wang-gug los encontraban?

—Mejor me quedó, ¿Solo irás al supermercado cierto?

—Sí, no voy a tardar mucho, solo compraré un par de cosas.

—Bien, esperaré en casa.

—Muy bien, no tardó. —Doyoung tomó su billetera y mochila para poder ir a hacer las compras, el supermercado estaba a unos 15 minutos caminando, así que en menos de una hora estaría de regreso, cuando la puerta cerró Chittaphon no pudo evitar correr a la ventana a un costado de la casa, dirección hacia donde se encontraba el supermercado y esperar a que Doyoung volviera, realmente le aterraba quedarse solo, justo como cuando vivía con su madre y ella tenía que salir por algún motivo.

El rubio suspiro nervioso, según el reloj de la sala había pasado una hora y 30 minutos desde que Doyoung había salió de la casa y ya estaba preocupado porque no volvía, dejo salir un suspiro comenzando a morderse el labio inferior, estaba desesperándose. El sonido de un auto siendo detenido fuera de la casa lo hizo reaccionar, al menos podía decirle a Jaehyun lo que ocurría e ir a buscar al peli rojo.

Sin duda corrió a la puerta de la entrada y abrió, lamentablemente el moreno no se encontraba ahí, tres hombres altos vestidos totalmente de negro estaban frente a la puerta e intentaron ingresar al lugar, Chittaphon cerró la puerta y salió corriendo hacia las escaleras, entró a su habitación y se metió bajo la cama.

No sabía quiénes eran esos sujetos, pero no se veían nada amigables, ¿En dónde estaba Doyoung y Jaehyun? Los tres hombres entraron a la casa y comenzaron a inspeccionarla en busca del rubio, no les tomó mucho para terminar subiendo al piso de arriba y registrar las habitaciones.

El corazón de Ten latía fuertemente dentro de su pecho, le dolía y su respiración era tan errática que cubrió su boca con una mano, ¿Quiénes eran esos sujetos?, ¿Que querían?, ¿Los hombres de Wang-gug lo habían encontrado?

—Aquí está —El rubio no entendió aquellas palabras, al parecer esos hombres no hablaban en coreano, justo en ese momento uno de ellos tomo su cuerpo y lo arrastró fuera de ahí. El chico comenzó a llorar mientras forcejeaba con él, ¿Qué carajos estaba pasando?

—Sostenlo con fuerza, tenemos que darnos prisa, tú apresúrate a tomar las cosas. —El hombre de complexión más pequeña y de más edad quien daba las órdenes saco de su bolsillo una pequeña jeringa y sin previo aviso sujeto la barbilla de Chittaphon y la clavo en su cuello inyectando aquel líquido en él.

Ocho... Nueve... Diez.

El chico cayó inconsciente siendo sostenido por el hombre grande quien lo había sacado debajo de la cama y quién lo cargo sobre su hombro como un costal de papas.

Mutismo || Taeten [ ✓ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora