04

1K 114 21
                                    

Cuando el reloj estaba a punto de marcar las 3:00 de la mañana, la mansión se encontraba un silencio donde sólo podía escucharse el viento que soplaba con fuerza.

Mientras que Sicheng, Jungwoo, Jongsuk y Kibum volvieron a sus casas, porque no querían incomodar en la mansión Lee, Taemin y Xiaojun, habían aceptado la invitación de pasar la noche allí, además de que no era la primera vez que lo hacían.

Dentro de la oscuridad que envolvía aquel pasillo, una de las puertas del primer piso, se abrió silenciosamente, con suaves pisadas aquella persona camino con lentitud hasta llegar al fondo, una vez que se aseguró de que no había nadie viéndolo, sujetó el picaporte de la última puerta, intentando abrirla haciendo el menor ruido posible.

Pero con aquel silencio en el que estaba sumergida la mansión Lee, cualquier movimiento se escuchaba bastante fuerte, por lo que aquel hombre se quedó congelado cuando escuchó el martillo de una pistola ser jalado, sintiendo el frío cañón sobre su cien.

—Ni si quiera te atrevas Taemin —Aquella voz sonaba tranquila y algo somnoliento, ¿En verdad alguien estaría toda la jodido noche vigilando aquella puerta en específico?

—Vamos Do, ¿Qué tiene de especial ese niño para que no me dejan verlo?

—Nada que te interese, así que es mejor que te des la vuelta y te metas a tu habitación.

—Si no tuviese ese cañón sobre mi cabeza, te metería a ese cuarto y me divertiría con ambos.

—Claro, el heterosexual de la mafia, si no quieres que te meta una bala en la cabeza, no te acerques a él.

Taemin sonrió de lado, negando levemente con la cabeza, mientras se alejaba un par de pasos de la puerta frente a él.

—Eres un aguafiestas Doyoung, me iré pero ya descubriré por qué tanto misterio con ese niño bonito.

—Si, si, ahora largo.

Doyoung espero a que Taemin se alejara por el pasillo, hasta verlo entrar en la habitación que había elegido para esa noche y una vez que desapareció completamente, guardó su arma.

Era verdad que ni él, ni la señora Lee sabían que haría Taeyong y Jeno con aquel chico, el cual ahora sabían que se llamaba Ten, pero Doyoung si sabía algo, sabía que ese niño le traía muchos recuerdos y una gran necesidad de querer cuidarlo, el castaño no pertenecía a la mafia, de ninguna manera y haría lo posible para evitar que algo le ocurriera.

Los hermanos Lee y Doyoung se encontraban sentados en la sala de espera del hospital privado de Seúl, en donde esperaban a que la doctora Haesoo saliera y les diera noticias o un diagnóstico sobre Ten

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

Los hermanos Lee y Doyoung se encontraban sentados en la sala de espera del hospital privado de Seúl, en donde esperaban a que la doctora Haesoo saliera y les diera noticias o un diagnóstico sobre Ten.

Ya habían pasado alrededor de cuatro horas y media desde que Haesoo había desaparecido por una de las puertas de cristal junto al chico de pelo negro, esto estaba siendo realmente aburrido y desesperante para los hermanos.

Mutismo || Taeten [ ✓ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora