05

1K 109 23
                                    

Y Doyoung lo cumplió, pues a la mañana siguiente, muy temprano, ya sé encontraba en la habitación del pequeño Chittaphon ayudándole a elegir su ropa.

-No sé mucho sobre estas cosas, yo casi siempre visto de negro, pero sé que a ti se te verá muy bien. -El mayor siguió revisando la ropa durante varios minutos, Ten ya comenzaba a tener frío, pues seguía envuelto en la bata de baño. -Toma, ponte esto.

-Do... No creo que deba yo-

-Shhh, Tennie por favor, dije que no aceptaría negativas de tu parte, sólo ponte la ropa. -Después de interrumpir al menor, Doyoung le entregó las prendas, las cuales recibió sin muchas ganas.

Pero aún así, después de algunos minutos el pequeño estaba vestido y para los ojos de Doyoung, sin duda alguna, se veía espectacular.

-Me encanta, ahora siéntate, no voy a dejar que vayas con el cabello así de alborotado.

A pesar de que su mamá solía peinarlo e incluso jugar con él, era muy raro que alguien que no fuese ella lo hiciera y le diera tantas atenciones, pero de igual manera, si reclamaba algo, no iba a ser escuchado, a Doyoung no le importaba cuanto se negara, él lo haría.

Una hora después, un lindo pelinegro estaba vestido con un pantalón ajustado color negro, roto de las rodillas, una camisa blanca que si era de su talla, junto a una chamarra color vino y unas zapatillas deportivas negras.

Y por si no fuera suficiente, Doyoung le arregló el cabello y también se atrevió a ponerle un poco de maquillaje, sobre todo delineador negro alrededor de sus ojos.

-Doyoung, en verdad esto es demasiado para mi, yo no utilizo estás cosas. -Chittaphon estaba frente al espejo sorprendido por la forma en la que se veía, era otra persona totalmente diferente, no se reconocía.

-Te ves genial, deja de quejarte y apresúrate, ya tengo hambre y huele a que hay hot cakes, mis favoritos. -El mayor salió de la habitación seguido por chico, que caminaba con inseguridad por el pasillo, una vez estuvieron al pie de la escalera, el mayor se adelantó a entrar a la cocina.

-Estamos listos, ¿Qué hay para desayunar? -Doyoung se apresuró a la mesa, sentándose entre Jeno y Taeyong, como solía hacerlo siempre, justo frente a la señora Lee.

-Muy bien cariño, en un momento la señora Kim te sirve tú comida, ¿En donde está Ten? -La mujer miró a Doyoung, pero su mirada se desvió cuando vio al menor de todos de pie en la entrada de la cocina. -Oh... -La señora Lee no sabía exactamente qué decir, ella creía que Ten se vería lindo con su nueva ropa, pero esto era aún mejor, definitivamente estaba sorprendida.

El par de hermanos al notar la curiosa y sorprendida mirada de su madre, no dudaron en voltear igualmente hacía el chico, quien estaba de pie en la entrada y eso fue una sorpresa para ambos, nunca creyeron que fuese posible que ese niño pudiese verse tan bien, el maquillaje le quedaba perfecto, incluso parecía un par de años mayor.

-¿Qué mierda le hiciste? -Como de costumbre JeNo no pudo mantener su boca cerrada y comenzó a hablar. -¿A caso fuiste a cambiar al pequeño Tennie por uno nuevo?

-Deja de hablar como si no estuviera aquí y sobre todo cierra la boca antes de que se te salga la baba, maldito pervertido -Doyoung golpeo la pierna de Jeno sacandole un quejido, pero funcionó, el menor de los hermanos volvió nuevamente a su desayuno.

Taeyong simplemente dejó salir un suspiro, parecía molestó, pero no era culpa de Doyoung que ese niño se viera tan bonito, así que ignoro a todos y continúa comiendo.

-Vamos cielo, ven aquí, luces increíble, me encanta tu ropa pero es hora de desayunar.

Chittaphon caminó rápidamente hasta la mesa sentándose junto a la castaña justo frente a Jeno, quién no le quitaba la mirada de encima.

Mutismo || Taeten [ ✓ ]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora