Quetzalcóatl un dios en dxd

Perfección

La bestia tenía casi todo su cuerpo cubierto de hielo, los cristales estaban crujiendo con fuerza mientras el cuerpo de la bestia empezaba a expulsar calor, la bestia poco a poco conseguía moverse pero a una velocidad lenta, su cuerpo grumoso seguía evolucionando, estaba cerca de su punto final, solo debía darle un golpe definitivo y hacer que evolucionará, después de todo ya estaba listo, los portales estaban cerrados y no se volverían a abrir, incluso el rojo tendría problemas para encontrar ese planeta en lo más profundo de la oscuridad.

Levanté mi mano derecha y dispare un grueso torrente de energía divina que empezó a desintegrar el cuerpo de la bestia, la energía carcomio el cuerpo de la bestia convirtiéndolo en poco más que polvo, exepto por una cosa, su núcleo que había empezado a expandirse mientras se fragmentada.

Un gran estallido destruyó cuentos de kilómetros a la redonda, una aura siniestra y oscura se sintió en todos los rincones del mundo, el núcleo empezó a tomar una forma antropomórfica mientras que la criatura tomo una forma prácticamente humana, la criatura se puso de pies en la mitad del cráter mientras sonreía, miro directamente a la posición del Dios que no se había movido de lugar, levanto su mano y señaló al Dios antes de señalar el piso frente a el, la evolución de la criatura había llegado a un punto increíblemente, de una bestia sin razonamiento y sin sentido de la preservación a una criatura con una inteligencia casi humana, el cambio fue en cuestión de poco menos de unos minutos.

A hora el núcleo estaba expuesto pero su forma mortal no sería suficiente para acabar con la bestia, esa era la preocupación del dios, su verdadera forma, su verdadero ser, los verdaderos colores de la serpiente emplumada, no importa cuánto se concentrará antes era casi imposible mantener su mentalidad mortal, pero después de los sucesos de la guerra de los puntos cardinales no había duda de que su personalidad cambiaría y sus metas no tendrían sentido, aún así era la única forma de destruir a este ser, confiaría en que el destino estuviese de su lado una vez más.

El ambiente volvió a cambiar cuando el dios cerró sus ojos, su expresión no revelaba ninguna emoción, era como una estatua, una obra de arte inexpresiva, la verdadera existencia de dios.

El dios camino lentamente con las armas hacia abajo hasta que por fin quedó frente a la criatura que parecía sorprendida por el cambio en la actitud, su presa había mostrado todo tipo de reacciones, era igual que cualquier otra presa solo que era increíblemente más difícil de cazar, entonces como había cambiado tanto, ni siquiera parecía vivo.

La bestia salió de sus pensamientos cuando el dios levanto su mano y tomo de la mandíbula a la bestia para después estirar su brazo hacia atrás empujando la cara de la bestia y enterrando su cabeza el suelo, la bestia sintió el suave agarre del dios y se enfureció, apenas podía moverse bajo el agarre del dios sin embargo apenas podía sentirlo, era como si no quisiera lastimarlo, solo quisiera mostrar que era superior y eso molesto a la bestia.

El primer impulso instintivo era alcanzarlo pero sus instintos no lo habían llevado muy lejos, así que de decidió probar otra táctica totalmente diferente, canalizo la energía en su mano derecha y una pequeña esfera negra se formo, la bestia atacó con la esfera pero el dios tomo su muñeca y con gran fuerza dirigió la mano hacia el rostro de la bestia que gruño en dolor cuando la la esfera tocó su rostro, le bestia se vio obligada a desaparecer la esfera, en ese momento la palma del dios ejerció presión sobre la mano de la bestia haciendo que este sintiera como su propia mano lo aplastaba contra el suelo, la bestia se concentro y su mano cambio sacando espinas que se clavaron en la mano del dios.

El dios salto así atrás mientras que la bestia se levantaba con un poco de esfuerzo, la bestia levanto la mirada y se quedó quieta al verlo, los ojos del dios perdieron el brillo, sus ojos que antes era cálidos y expresivos se tornaron totalmente fríos, ojos que solamente lo miraban con desprecio y asco, recordaba esa mirada, recordaba esta sensación, incluso a hora se sentía pequeño ante esa mirada, apesar de ser más grande en tamaño veía a su oponente como un pilar gigante que era más alto que propio cielo, eso solo lo emociono más, si el dios era un pilar que tocaba el cielo el sería el primero en llegar a la cima.

El núcleo soltó más energía mientras que la criatura burbujeaba, su físico se volvió más delgado y afilado con piernas y brazos increíblemente largos, la bestia salió despedida a una velocidad increíble pero el dios simplemente esquivo todos sus ataques, mientras su rostro permanecía inmutable, realmente poco le importaba que una criatura inferior tratará de alcanzarlo, sin embargo era molesto, su presencia no era grata y su energía burda aunque grande carecía de la gloria que poseía la suya, este ser era un burdo intento de replicar su mayor milagro, la esencia de un dios.

Está sería la lucha destinada por el destino, la perfección contra la evolución, el caos contra la calma, dos entes más haya de la comprensión en una lucha que podría destruir el mundo, dos seres que eran únicos en su propia esencia, cada uno representando uno de los cuatro aspectos del todo.