Tecito y Brujita

887 72 10
                                    

POV Natasha

- Nadie está obligado a amar a otra persona por toda la vida, Steve, lo tengo claro. No es mi caso, no me estoy apresurando y no todo está perdonado. - Le dije y él frunció el ceño. - ¿Entonces? - Preguntó y me encogí de hombros. - Tengo dos opciones, dejarla ir completamente o aceptar que no es eso lo que quiero y esforzarme por obtener una solución. - Él asintió.

- Eso lo entiendo, ninguna relación es perfecta, todos pasamos malas épocas Natasha, pero Wanda lo llevó a otro nivel, ¿no te da miedo todo esto vuelva a suceder? - Me preguntó y asentí. - Claro que tengo miedo Steve, por eso es que tenemos que buscar ayuda, sé que la amo, sé que me ama, sé que puedo confiar en ella, pero me es difícil confiar como confiaba antes de que todo esto suceda, antes de que ella sintiera que para manejar su dolor tenía que infringírmelo también, antes de que me haya derrotado en vez de insistir o esperar un desenlace distinto para lo nuestro. - El sonrió con cuidado. Sabía que no es que no nos apoyara, sino que nos estaba cuidando y quería saber estábamos decidiendo en frío sobre nuestra relación.

- Estás haciendo lo correcto entonces. - Me dijo y suspiré. - Eso espero, la veo ahora y créeme también siento que esto es lo correcto, creo otra vez que puedo hacerla feliz, que ella confía en mí, en que puede estar bien conmigo, que los puedo proteger. - Él se apoyó en mi escritorio para poder tomar mis manos. - Siempre lo has hecho Nat, lo que ustedes han pasado es más de lo que muchas parejas pueden controlar o manejar, el que aún sientan pueden intentarlo y lo quieran solucionar a pesar de todo lo que han hecho mal, dice mucho del amor y aprecio que se tienen. - Sonreí.

- ¿Lo has hablado ya con Clint? - Me preguntó y moví de lado a lado mi cabeza. - Algo así, ambos, tanto Clint como Pietro, saben lo estamos intentando solucionar, pero sentimos que ya los hemos tenido a ambos durante mucho en el medio, esto es algo que tenemos que arreglar Wanda y yo nada más. - Argumenté y él asintió.

- ¿Y Bárbara? ¿Qué harás con ella? - Me alejé un poco y me volví a tumbar en mi asiento. - Nada, yo le dejé más que claro que no estaba interesada. - Expliqué y él hizo un gesto burlón. - Pues no parece haber captado el mensaje y recuerda que estará en la fiesta de más tarde y Wanda también. - Me dijo y asentí. - Bárbara puede hacer lo que quiera, incluso caminar de cabeza y aún así no llamaría mi atención. Tú sabes que desde que conozco a Wanda nunca más he podido registrar a nadie. Es mi esposa Steve, da igual lo que diga un papel o el registro civil. - Espeté y él se comenzó a reír.

- Siento que hoy Tony y yo nos vamos a divertir gracias a ti y a Maximoff. - Sé burló y lo miré mal. - Stark te ha corrompido. - Lo vi sonreír. - Puede que un poco pero no tanto como yo a él. - Jugó y puse cara de asco. - Ya madura, que cada día estás más cerca de llegar a base cuatro. - Me dijo y fruncí el ceño. - ¿Debo recordarte la cantidad de años que me llevas? - Contraataqué y levantó sus manos en señal de rendición.

***

- Hey... - Apareció Wanda a mi lado y sonreí ligeramente. - Noches, porque buena estás tú. - Jugué y aquello la hizo reír. - No lo haces nada mal. - Me respondió y la miré de soslayo. - Disimula Maximoff. - Le respondí. - No tengo por qué, soy tu mujer. - Dijo y tuve que contener el impulso de reír.

- Sí, me temo que es algo que vamos a tener que dejar claro esta noche, hay un par de idiotas que no dejan de mirarte. - Le dije y ella se mostró sorprendida. - ¿Celosa? - Preguntó y negué. - ¿A caso no es en mi cama y debajo de mí donde vas a terminar la noche? - Me acerqué disimuladamente a susurrarle y percibí cómo dejó de respirar por un instante. - ¿Eso quiere decir que puedo ir y saludarles? - Reaccionó a nuestro juego y sonreí.

- Recibes lo que das. - Le contesté y ella frunció el ceño.  - Como te acerques a otra mujer te cortaré los dedos y te los serviré para comer. - Me respondió en automático y me comencé a reír. - ¿Celosa? - Pregunté por molestar y ella me puso los ojos en blanco. - ¿A caso no soy yo la única mujer que deseas? - Respondió de la misma forma que hice yo y sonreí. - Lo eres, para mí siempre eres solo tú. - Susurré y tendí mi mano suavemente hacia ella. - Pero si es la feliz pareja. - Apareció Bárbara y tiré de Wanda hasta mí colocando mi mano sobre su cadera.

Amor en Té - Scarletwidow / WandanatDonde viven las historias. Descúbrelo ahora