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ATENCIÓN: [+18]



Bienvenidxs a lxs nuevxs lectorxs y gracias a lxs de siempre.





Sus ojos.

La brisa que entraba del ventanal entreabierto chocaba contra las curvas  desnudas de la pelinegra, haciéndole que sintiera un leve cosquilleo en su piel. El clima estába lo bastante pesado como para dejar que más de la mitad de su cuerpo desnudo sea expuesto con la libertad que lo hizo. Ni siquiera aquella brisa le era satisfactoria para poder remendar el calor que estaba empezando a hacer en tan temprano  despertar.

Con un leve quejido se estiró en el futon debajo de su cuerpo, sus ojos se entreabrieron de apoco adaptándose a aquel sol de mañana que le iluminaba al colarse entre los vidrios. Maldijo bajito al saber que fue Shisui quien dejó las cortinas abiertas. Otro quejido se le salio de sus labios como si fuera una cría, hundió su rostro en la almohada. Luego un ronroneo de satisfacción se le escapo cuando sintió el aroma del Uchiha impregnado en la suave funda, abrazo aquel objeto de plumas respirando hondo para disfrutar todo lo que pueda. Río al pensar que a vista de cualquiera parecería una psicópata.

Se dio vuelta nuevamente dejando sus redondos pechos al aire haciendo que los mechones de su largo cabello se desparraman por la almohada y el futon. Poniendo sus brazos hacia arriba arqueo su cuerpo y dejo salir un bostezo que le indico que aquel dormitar no le fue suficiente.

Sentándose de manera pesumbrosa sobre el futon miro hacia los lados encontrando en un costado la remera doblada  de Shisui que había utilizado la madrugada anterior, luego de ducharse, para luego ser arrebatada con pasión por las manos masculinas. 

Se levanto con movimientos delicados sintiendo sus piernas pesadas y temblorosas, una risita descarada se le escapo al recordar la causa de aquella consecuencia.

Tomo la remera y se la colocó para tapar su desnudez hasta sus muslos. Quito el cabello debajo de la prende y enlongo moviendo su cuerpo hacia los lados al sentir sus músculos pesados. Una mueca se formo en sus labios al sentir una sensación incómoda en sus pierna, pero su atención se desvío al escuchar los ruidos provenientes de la cocina. Entonces no lo dudo, a pasos apresurados camino hasta ahí para ir en busca de aquel calor que se le había escapado en algún momento mientras dormía.

Miro como la casa se encotraba alumbrada por el sol entrante en cada ventana abierta, a Shisui le encantaba tener la casa areada y alumbrada, fue Kagami quien le inculcó ese hábito.

Otro bostezo se le escapo mientras llevo un mechón de su cabello detrás de su oreja. La entrada de la cocina estaba con sus puertas corredizas de par en par abierta. Una espalda masculina se dejo ver al estar el joven preparando algo sobre la mesada que Futaba no llego a divisar. La boca se le hizo agua a la Asahi, al ver aquellos músculos marcados y como sus hombros eran lo bastante formados para desear posar sus labios y su lengua ahí, nuevamente.

Siendo sigilosa camino con delicadeza en el piso de madera barnizada hasta llegar al joven así abriendo sus brazos y tomándolo sobre su cadera para apoyar su cara en aquella piel que todavía se encontraba cálida.

El aroma, aquel aroma la hacia incapaz de pensar coherente. Si solo el aroma masculino la ponía de cabeza, ahora mezclado con el de ella y un leve olor a sudor, era inexplicable la sensación de pertenecía que le hacia transitar.

ASAHI FUTABA - Hatake Kakashi |Naruto|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora