-Ya te lo digo yo, deberías haber venido a la fiesta de Max ¡Estuvo increíble!- la voz de Danna, mi mejor amiga, sonaba increíblemente fuerte a través del teléfono. Incluso mis padres voltearon a verme asustados y tristes por haberse perdido la increíble fiesta de Max.
Max era un chico bastante popular en la escuela y dicen las malas lenguas que se siente atraído por casi cualquier cosa que se mueva, pues coquetea con cualquier chica esté o no alcoholizado. Fui su objetivo durante una fiesta de primavera en la escuela, pero no era un hombre al que me sintiera atraído y menos con aliento alcohólico por haber metido vodka ilegalmente a la escuela.
Pero Danna creía que era indudablemente estúpida por haber rechazado sus intentos de ligoteo. ¿Acaso no te has fijado en su increíble y castaña cabellera? ¿Esos ojos avellana no despiertan nada en ti? ¿Acaso tienes alguna especie de Retraso? Amiga ¿eres lesbiana? Toda clase de preguntas se le vinieron a la mente en el momento en que me vio rechazar a Max, el popular. Sin embargo yo no sentía nada, no sólo no por él, sino que por nadie en esa tonta escuela.
Para mí los chicos eran absurdos, idiotas a la octava potencia. Que digo octava ¡DÉCIMA POTENCIA! Era como que elegían cada momento del día como óptimo para andar mostrando cuan imbéciles eran. O por lo menos así me lo parecía a mí. Pero para mis padres era normal que me sintiera extraña con las personas de ese estilo.
Me había criado en un pueblo un poco conservador y alrededor de una familia que se había dedicado al ámbito intelectual desde épocas de mis tátara, tátara abuelos; hombres de literatura, política. Diplomáticos y empresarios recatados. Mujeres en las Naciones Unidas y feministas empedernidas. Una familia tan bien educada y tan poco tolerante que vieron absurda mi decisión de dedicarme a la música.
De haber elegido ser pianista, violinista o soprano, la cosa hubiera sido distinta. Pero para ellos tocar la guitarra en una banda de pop punk y ser la vocalista de voz ronca, era algo inconcebible. Debiste de haber sido como tu primo, el está estudiando para poder administrar la empresa de su madre algún día. Un gran empresario, como la familia merece.
Por mí, la familia podía irse a tomar por cu...
-¿Qué dice Danna? ¿Además de que te perdiste la fiesta de ese tal Max?- mis padres eran un poco más tolerantes con mi decisión. Mi padre fue baterista y conoció a mi madre en una tocada, cuando ella se escapó de casa una noche para intentar convivir con los adolescentes de su edad, que no eran tan imbéciles como los de mi generación. Ella iba a conciertos de rock y clubes de lectura, los vagos de mi clase sólo se alcoholiza y va a fiestas a besuquearse con cualquier persona.
Danna es mi mejor amiga, pero a veces me pregunto qué hago con ella, pues no tenemos nada en común. Gusta de música pop, pero muy el lado fresa, más al estilo Britney Spears o Ariana Grande, y sus películas favoritas son tan románticas que derraman miel a través de la televisión. Me gusta el género romántico, pero un poco más tirado a la comedia que al drama, y eso que soy toda una Drama Queen; ella, además, es totalmente femenina, cada cosa que compra debe ser rosa o en colores pastel y coquetea con todos los chavos aún sin darse cuenta. La mitad de mis cosas son grises y la otra mitad son verdes, Slytherin está en mi sangre, y cuando un chico intenta acercarse suelo batearlo hasta hacer home run pues, como Max, suelen ser hombres tan inmaduros que no despiertan nada en mí.
-Nada, sólo me pregunta cuando vuelvo de mis vacaciones. No le dije que nos quedaríamos aquí otra semana antes de volver a la escuela de retrasados, sin ofender a las personas con discapacidades mentales- dije, aunque mi mamá rodó los ojos y me dio un sermón, rio un poco al entender que no lo hacía con el afán de ofender... al menos no a las personas con discapacidades mentales genuinas.
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Volver a Amarte
RomansaLa vida de un gato es aburrida: comer, dormir, repetir. Pero si eres el gato de una bruja las cosas cambian, sobre todo si una de sus clientas ha llamado tu atención y no en el sentido en que imaginas. Acompaña a Ezra en esta mágica aventura en la q...