★ CAPÍTULO 24

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Adela G.

Desde que Althol se marchó de África, solo he estado esperando noticias de parte de Jacob,  quien aún no se ha comunicado y Miranda tampoco ha logrado encontrar nada, en la casa de seguridad no sé, si ha habido algún movimiento me he limitado a salir de la habitación, la comida he pedido que me la traigan directo al cuarto y he sido obligada por Miranda a descansar para sanar rápido.

Ni Codat ni Althol se han comunicado, y todo por mi alrededor aparenta estar en tranquilidad, cosa que es preocupante.

Mark vino hace unas horas lo note raro, sentí que tenía intenciones de decirme algo, pero al final no lo hizo, me conto sobre lo que han estado haciendo en las ultimas hora y también me informo como se encontraba el lugar.

En la tarde se armó un botín y hombres de Althol se involucraron en una pelea con mi equipo, no estuve ahí y no me enteraba si Mark no me contaba, mi estado de ánimo está decayendo y me ha tocado reconocer que no estoy en mi mejor momento. Aunque he intentado descansar se me ha hecho algo imposible, el cosquilleo en mis manos ahora es más intenso y las pesadillas vuelven a ser la guía de mi timón.

No sé cuántas veces he perdido el control en las últimas horas, Miranda casi lo noto, porque por poco tengo un episodio cuando estuvo aquí por ultimas vez y las pastillas que me había dado Andrea no sé donde llegaron a parar.

La puerta es abierta nuevamente y Miranda se adentra a la habitación.

— ¿Alguna noticia?—inquiero desde que la observo.

—Creo que encontré algo. —replica

Comienza acercarse a mí y se deja caer a mi lado sobre la cama, con su laptop abierta sobre sus piernas.

—Luego de lo que me contaste, sobre el dispositivo que te dijo Jacob que tenía Abby, busque mucha información, ese tipo de aparatos tecnológicos, tienen una nivel de magnetismo alto, es imposible que sea ignorado por rastreadores internos...

—Espérate. —intervengo. —Repite todo pero en español por favor.

Comienzo a acomodarme sobre la cama a su lado, mientras la escucho reír ante mi respuesta, se de informática fui la mejor dentro de las clases que nos daba la UFMA en los entrenamientos.

Pero cuando a Miranda la inspira algo, comienza hablar tanto que ni ella misma se entiende.

—Lo que te decía es que, ponemos rastrear a Abby sin necesidad de hacerlo manualmente es decir, sin tener el aparato que tiene Jacob, entonces estuve buscando, ese nivel de magnetismo, pero no encontré nada aquí en Sudáfrica, si Jacob te dijo que su última ubicación fue aquí, debería aparecer algo y no hay anda.

—Entonces es muy probable que Abby ya no se encuentre en Sudáfrica.

—Exacto, la única manera de rastrearla es si estamos en la misma zona geográfica que ella.

E X P U G N O ©Donde viven las historias. Descúbrelo ahora