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Narrador anónimo
2 años después del final de EXPUGNOPsiquiátrico Roselmovert - Rusia
Tenemos poco tiempo, el jet aterriza arriba del hospital psiquiátrico. El se queda dentro mientras yo comienzo a bajar para verla.
La última vez que estuve aquí fue hace una semana y esta será la última vez, fue una decisión difícil, pero como están las cosas, creo que es lo mejor.
Han pasado tantas cosas que no se por donde empezar, Adela está en un hospital psiquiátrico desde hace dos años, los doctores no le dan mucha esperanza, ha perdido su peso corporal y no recuerda nada de lo qué pasó, ni a nosotros.
Ya no estamos en ubicados en Alemania, ahora nos movemos cada mes de país para que no nos encuentren, pero las cosas han estado jodidas.
Las secuelas del resultado del experimento EXPUGNO, aún siguen pasado factura y la ausencia de Adela hace las cosas aún más difíciles.
Duramos meses pensando en esta decisión y por nuestra seguridad y la de ella o lo que queda de ella; es lo mejor no seguir arriesgándonos, no sabemos si esto es una trampa y él decirme donde ella estaba sería para que la viera, sería todo parte de su plan para atraparnos.
En cualquier momento las cosas podrían cambiar y ahora tenemos más cosas y personas por las cuáles preocuparnos.
—Buenas tardes Señorita ¿vino a lo de siempre?—pregunta la secretaria al reconocerme y asiento.—Puede pasar el doctor la está esperando.
Me adentro por los pasillos del hospital psiquiátrico, este no el lugar para ella, pero él dice que aún en esta condición ella sigue siendo un peligro y eso que no puede ni comer por si sola.
—Buenas, que gustó verla por acá.—dice el doctor al verme.
—¿El ha vuelto?—pregunto cuando me paró junto a él frente al cristal que permite ver su habitación.
— Solo usted viene a verla, creo que él se rindió desde el día que la dejo. Parecía que le dolía verla así. —indica el doctor— Ya no hay mucha esperanza para ella.
—¿Aún no recuerda nada?— Le preguntó al doctor
—No, es como si estuviera muerta. Sus recuerdos y memorias desaparecieron, no sabe quién es ni lo qué pasó, no sabe dónde está.—indica— Y es posible que...
—¿Es posible que doctor?— me alteró
—Es posible que nunca lo recuerde, es posible que muera en ese estado.—indica mientras me abre la puerta.
Entro a su habitación la he visitado cada semana desde hace dos años, desde lo qué pasó ella sigue aquí, amarrada como un animal para evitar que se haga daño y que haga daño en alguno de sus ataques. Vive sedada como un animal.
Esperaba que con los meses volviera en si, pero cuando se pasa muchos años ocultando lo que eres, acumulado emociones y viviendo todo solo es lo que sucede, terminas roto, no por meses, roto para toda la vida.
Así es como termino Adela, él la puso aquí y oculta su paradero mientras los demás aún la buscan, solo me dijo a mi que ella estaría aquí luego de lo que sucedió, fue tan traumático para ella, que terminó en un shock mental permanente, sus enemigos la dan por muerta y es lo que parece.
Desde ese día nunca ha hablado, no me reconoce ni se reconoce a ella misma, los doctores dicen que nunca mejorará y que lo más probable es que debería darme por vencida.
No queda nada de aquella mujer fuerte e imparable, de la tormenta que arrasaba todo a su paso, de aquella que luchaba sin parar, no queda nada y creo que este es el final.
Me acerco más a ella y la miro a los ojos, creo que llego el momento de despedirme.
—Adela— me acercó más y esta despierta.—Lamentó que esta sea mi última visita, no puedo arriesgarme más, bueno arriesgarnos mas.— aclaro al recordar al encargo que ella me dejó.—pensé que para cuando se cumplieran dos años ya habrías mejorado, pero sigues igual o peor, nos siguen buscando y no quiero arriesgarme a ello, ella merece la felicidad que nosotras no tuvimos.
>> Debes saber que siempre apostaré por ti y aunque este es el final para ti, tú legado será parte de nosotros, te recordaremos como la Adela que peleaba sin parar, la que nunca se rindió y seguiré protegiéndote. Ella sabrá de ti, sabrá de lo increíble que eras y de las cosas maravillosas que hiciste, pero sobre todo sabrá que como la protegiste hasta el final, y te prometo que él no sabrá de ella, nunca dejaré que esté con ella, porque ella siempre será una parte de ti que protegeré con mi vida... Fue un placer pelear a tu lado Adela, es un placer cuidar de quien te devolvió tu humanidad y fue un placer conocerla Agente Golubev nos veremos en otra vida.
Sin darme cuenta las lágrimas salieron y mientras comiendo alejarme, me detengo en la puerta y toco dos veces para que abran. Pero me quedo fría al escuchar, me detengo en seco y giro lentamente mi cabeza. No puedo creer esto, no puedo creer lo que escucho.
—Miranda ¿Eres tú?...
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Hola amores, se que aún no es Año Nuevo pero desde ya, Feliz Año Nuevo para ustedes, espero que lo pasen con sus familias, seres queridos y amigos. Se qué tal vez para algunas fue un año difícil para otro a lo mejor el mejor año de la vida, nunca olviden que son increíbles que tienen oportunidades maravillosas. Nunca se rindan y nunca dejen de creer en ustedes, la vida da muchas vueltas y pasan muchas cosas pero mientras nos tengamos a nosotros mismos siempre será una fuente de apoyo.
Gracias por seguirme apoyando a pesar de mi ausencia, gracias por no abandonar EXPUGNO, las amo.
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E X P U G N O ©
Teen FictionAdela fue entrenada para causar caos y destrucción a su paso, no tiene límites. Ella quiso pertenecer a una de las fuerzas especiales más importantes de los Estados Unidos la UFMA (Unidad de fuerzas mundiales anónimas). Con tan solo 22 años se ha c...