Capítulo 1

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¡Sorpresa!

Apuesto a que no esperaban esto tan rápido, pero como he sido un alma muy buena, escribí como loca los extras de Ayame y Koga para traerle el chismecito caliente del otro libro.

Espero que disfruten del capítulo y le den mucho amor con sus votos y un montón de comentarios.

Los amoro mucho.

¡Que arranque esta historia!





De las cosas que he tenido que aprender desde que me fui de mi país es que jamás me dejaría humillar por nadie nunca más. Viví demasiado tiempo en el suelo. Viendo como otros me pisoteaban, me humillaban, me rebajaban a simples traumas y miedos, pero como todo en la vida tiene un cambio, mi cambio es a mejor. Ya nadie volverá a verme desde arriba, ahora soy la persona a la que otros quieren ver en sus fiestas porque eso causaría que otras personas se interesen en ellos, mi presencia en un lugar es desatar muchos comentarios a los cuales no he prestado atención porque no me interesa.

Miro mi copa dándole suaves movimientos. Sé que los ojos de todas las personas recorren mi estupenda figura mientras una vez más le sonrío al hombre que en pocas palabras acaba de decir que no merezco el puesto que tengo. Al parecer él como muchos otros están muy desinformados. Lo conozco bien, un idiota con un ego muy grande que podría haber sido el sustituto de mi padre como jefe de todo, es una lástima para él que hace cuatro años aparecí y me partí el lomo estudiando y trabajando como loca para aprender a administrar las empresas de la que desde hace cuatro años es mi familia.

No le temo, pero no se supone que sería en la fiesta de empleados que él diría esa estupidez delante de todos, algo como: la única razón por la que ahora tienes el poder es porque tu padre se dejó engañar, pero se irá al infierno todo su trabajo, ¿Cómo una mimada podría hacerle frente al imperio que tiene?

No puedo evitarlo y al mirarlo comienzo a reír con burla causando que las miradas desconcertadas de algunos socios que vinieron al evento caigan en mí. Los empleados nos miran de reojo porque este bastardo frente a mi esperó que la música se detenga para hablar muy alto todas las idioteces que quería soltar.

—Me divierten los resentidos como tú—comento con una cínica sonrisa—no tengo que darte explicaciones, pero ya que pareces muy interesado en mí, te diré algo—hago pausa para tomar un sorbo del delicioso vino que pasa con suavidad por mi garganta—estudié en una buena universidad para sacarme un título y poder manejar las empresas de mi padre, no solo eso, mientras estudiaba trabajaba desde abajo, aprendiendo todo. Estuve poniendo en práctica todo lo que aprendía desde hace años, no te compares conmigo. ¿Qué experiencias tienes? Porque cuando revisé todo lo que hiciste, solo encontré muchas pérdidas a la empresa, perdidas que le ocultabas a mi padre—con una sonrisa me acerco a él viendo su rostro ponerse rojo—el imperio que tengo en mis manos, ahora es totalmente mío. Esta mimada es quien ha estado haciéndolo crecer desde que tomó el mando, así que, si no tienes alguna basura más por decir, te despido, espero que las calles te enseñen que, a la jefa, no se le falta el respeto—sonrío bebiendo lo que queda en mi copa para luego caminar con pasos tranquilos, pero seguros, irradiando sensualidad en mis movimientos.

Antes no me gustaba la atención que puedo recibir por lo bien que me veo, pero eso cambió. Me gusta que me observen, me gusta que recuerden quien soy y lo que puede ser meterse en mi camino. Hundir idiotas es fácil cuando solo haces mierda sus estúpidos comentarios. No tengo que rebajare a los insultos para mandarlos al carajo.

Travieso DeseoDonde viven las historias. Descúbrelo ahora