UNA TORMENTA ARRASA POR TODO EL MUNDO, CUANDO DE UN MOMENTO A OTRO EMPIEZAN A DESAPARECER GENTE, ENTRE ESTOS ESTAS ALGUNOS REVOLUCIONARIOS, MARINES Y PIRATAS, TODO GRACIAS A LA DIOSA DEL TIEMPO QUE DECIDIO QUE DEBERIAN CONOCER A SUS HIJOS.
Leiya les había dicho a todos que podían tomarse un descanso, podían parar a comer o incluso irse a dormir. Casi todos habían empezado a levantarse para irse a descansar un rato, cuando de repente una luz inundó el lugar.
La luz desapareció tan rápido como apareció y de esta apareció un chica que portaba la misma aura que Leiya. La mujer era hermosa, su piel completamente blanca y sus cabellos rubios llamaban mucho la atención.
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
-Hola muchachos, soy la Diosa Hekate- Leiya suspiró al reconocer a la chica, sabía que cuando ella aparecía era siempre para recordarle que no estaba haciendo las cosas bien o que las estaba haciendo medianamente bien pero aun así había olvidado algo- estaba muy entretenida viendo todo esto que no puede evitar intervenir en cuanto me di cuenta que a Leiya se le habían pasado algunos detalles. Así como Leiya es la diosa del tiempo, yo soy la diosa de la verdad, es decir se toda la verdad de todos los mundos, tanto lo que se quiere esconder o lo que nadie sabe, como lo que todo el mundo ya sabe pero que lo ignora. Decidí que podía traer una cuantas personas aquí, al igual que se están presentando vuestros descendientes, me di cuenta que para acabar de conocerlos debían presentarse otras personas, las personas más cercanas a ellos. Por lo que aquí los traigo.
La diosa chasqueó los dedos y al igual que con la diosa, una luz inundó todo el lugar para posteriormente dejar ver a unos cuantos jóvenes, algunos traían capuchas y otros no
-bueno, en realidad yo ya les expliqué todo, por lo que voy a dejar que se presenten algunos de ellos- señaló a los que no traían capucha- ellos son los más allegados de los que ya se han presentado por lo que no vi necesario ponerles capucha- la diosa iba a continuar pero Leiya la interrumpió.
-¿y por qué has decidido intervenir ahora?- preguntó Leiya, algo fastidiada, ¿por qué siempre debía recordarle sus fallos?
-bueno, creo que has echo bien en traer a los jóvenes, pero decidí que también deberían conocer a sus amigos, pareja e incluso a los que actúan como familiares, sin ellos la información no puede estar completa, porque aunque ellos se presenten solo verán como se ven ellos mismos, por lo tal no está mal tener otra perspectiva.
-si, supongo que no había llegado a pensar en eso, es buena idea la que has tenido- Hekate sonrió, ella siempre tenía razón ya que sabía toda la verdad y lo que debía hacer, solo que se tardó un rato en intervenir, estaba bastante entretenida viendo todo.
-muy bien, ¿Qué tal si empezamos por el primero? Después de esto podréis descansar, siento mucho haber intervenido justo cuando todos queríais descansar un rato- todos suspiraron y volvieron a sentarse- muy bien, empieza tu Fest- al oír el nombre, Keiji que estaba hablando con su hermano fijó la vista al frente, estaba deseando ver la presentación, aunque estaba deseando ver aun más al chico.
Un joven muy hermoso se posicionó donde anteriormente estaba Hekate, todos los demás se sentaron en otro grupo, mientras que Hekate se sentaba al lado de Leiya.
