UNA TORMENTA ARRASA POR TODO EL MUNDO, CUANDO DE UN MOMENTO A OTRO EMPIEZAN A DESAPARECER GENTE, ENTRE ESTOS ESTAS ALGUNOS REVOLUCIONARIOS, MARINES Y PIRATAS, TODO GRACIAS A LA DIOSA DEL TIEMPO QUE DECIDIO QUE DEBERIAN CONOCER A SUS HIJOS.
Kai caminaba por las calles de Sabaody, junto a él caminaban dos de sus amigos. Los tres formaban parte del ejército revolucionario y tenían la misión de adentrarse en la subasta de esclavos sin que nadie notase sobre las intenciones que estos traían. Su propósito era liberar todos los esclavos y si eso no podían hacerlo al menos liberarían todos los que pudiesen. En resumen, harían de la subasta un caos absoluto.
-Esto es asqueroso- la única chica entre ellos habló en cuanto vio la escena frente a ellos. Un tenryuubito se hallaba acosando a un joven frente a ellos. Kai extendió la mano para poder sujetar a Clara que tenía la completa intención de ir de cara contra ellos. Aun no era tiempo de que se metiesen en problemas.
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-sabes que aun no puedes hacer nada- Kai alzó la vista mientras se fijaba en el joven al que estaban acosando los tenryuubitos, más específicamente uno de ellos y se quedó de piedra. El joven pese a tener muy mal aspecto miraba al tenryuubito con una clara mueca de desprecio. Estaba seguro de que esa mueca solo produciría que le metiesen una paliza, pero al joven eso no parecía importarle. Estoy seguro de que si ese chico no tuviese una mordaza en la boca ya les hubiese insultado de alguna forma, estaba completamente seguro.
-voy a salvarlo- les dije a ambos- Clara y Jhoss me miraron como si me hubiese salido otra cabeza. Estoy seguro de que pensaban que me había vuelto loco, sobre todo teniendo en cuenta que hace tan solo un segundo acababa de parar a Clara.
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(JHOSS)
-¿Y como piensas lograr eso?- esbocé una enorme sonrisa, las ideas inundando rápidamente mi cabeza.
-estoy seguro de que irán a la subasta, me colaré allí como un esclavo e intentaré que sea él quien me compre. Lo liberaré antes de que se atrevan a ponerme la marca de los dragones celestiales- en ese momento no sabía que mi plan acabaría por irse al garete.
-por supuesto que si- ambos suspiraron sabiendo que no podían hacer nada para que yo cambiase de idea.
-lanzaré rumores sobre ti para que lleguen a los oídos del tenryuubito y que así acabe comprándote- asentí ante las palabras de Jhoss. No sabía porque pero ese joven me atraía hasta el punto de hacer una locura por él. Incluso sin habernos conocido nunca antes, ni haber cambiado ni una sola palabra entre nosotros.
