-¿Quién era ese chico que te abrazó? -La rabia en la voz de Yannick me hizo fruncir el ceño.
-El es...
Rió cruzándose brazos.
-¿Te lo follas? Te escapas de la mansión para fallártelo ¿verdad? Pensé que no eras así, que decepción -la burla en su voz me hizo enfurecer.
Levanté la mano y se la estampé contra la mejilla derecha, me miró sorprendido y yo a él lo miré con decepción.
Nunca me imaginé que una pregunta así saliera de los labios de Yannick y más que fuera dirigida a mí.-¿De verdad piensas que me lo follo? -Reí.
-¿Quién es entonces? Por qué estoy seguro de que amigo no es, no tienes.
Abrí la boca sorprendida y asentí.
-Es mi hermano imbécil -el arrepentimiento en sus ojos me hizo reír.
-Zenda -. Negué.
-Me voy con él, tengo cosas que hacer fuera del pueblo.
-Zenda, por favor, perdóname.
Las lágrimas salían tanto de sus ojos como de los míos.
La presión en el pecho me hacia respirar con dificultad. Salí de la mansión y caminé hasta llegar a Roberto. Al verme llorar frunció el ceño.-¿Qué te pasó?
Miré hacia atrás y vi a Yannick mirándome.
-Vámonos.
Pasamos la brecha y sin mirar atrás llegamos a mi casa. Miré a Roberto y con una sonrisa fingida lo miré.
-¿Cómo lo hacemos?
-Cuéntame antes que te pasó.
-Yannick desconfió de mí, pensó que estaba acostándome contigo y bueno... Tampoco me lo dijo con buenas palabras.
Lo vi moverse hasta la puerta, lo cogí del brazo.
-¿Donde vas?
-A explicarle las cosas -dijo con pena en la voz.
-No, déjalo, empezamos con esto.
Roberto me miró sin querer hacerme caso, pero al final asintió. Nos acercamos a a la mesa y comenzamos a idear un plan.
-Bien, la idea es esperar a que nos coja, tan sólo hace unas semanas que lo vi en el pueblo, no tardará en dar con nosotros.
-¿Cómo lo capturamos?
-Buena pregunta.
Miramos al mapa pensativos.
-¿Qué poderes tienes?
Volvió la mirada hacia mí.
-Todos los que te puedas imaginar.
-Petrifícalo, hazle un hechizo que no se pueda mover.
-Hermanita, no he estudiado con Harry Potter.
Lo miré y reí. Me senté en el sofá y miré hacia la ventana. Sentí que el lado derecho del sillón se hundió y giré la cabeza.
-Deberías hablar con él, he estudiado un poco sobre los hombres lobo, las lunas y todo eso, y si no lo tienes a tu lado estarás todo el tiempo así -sonreí.
-No entiendo por qué desconfió de mí. Nunca le di motivos para hacerlo -me encogí de brazos.
Roberto pasó su brazo por mis hombros y me acercó a él para luego besarme la cabeza.
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Anclada✔️
Manusia SerigalaPortada creada por: @luaescribe😍🛐 ¡Completa! Primero libro de la saga: Anclada. Un bosque. Una noche. Una chica. Un lobo. Hay mucho porcentaje de que salga bien... Pero Zenda nunca tiene buena suerte, nunca le sale bien algo. Esa noche cambió su...