☆Mochi Compartido☆ ||BTS||

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La gran habitación, que hacía de sala de estar en la mansión de los Min, se encontraba habitada por dos personas que mantenían una charla interesante acerca de bebés, o mejor dicho, personas con comportamiento ABDL.

Kim Seokjin era el hijo mayor de dos empresarios exitosos, Kim Taehyung era el hijo menor.

La madre de Seokjin fue modelo, para después convertirse en diseñadora y heredar su línea de ropa, maquillaje y zapatería a su hijo mayor. Por supuesto que no se había olvidado de su hijo menor, a él, le había dejado su línea de perfumería, accesorios, como bolsos, carteras y un poco de bisutería y corsetería. En pocas palabras, había dividido su fortuna en sus dos hijos. El padre de los hermanos Kim no se había quedado atrás, él les había dividido Hyundai Motor así como una compañía multinacional de entretenimiento, Big Hit. Si por sí sola la empresa tenía mucha productividad, al Yoongi tomar el mando se convirtió en una potencia que hizo que muchas otras empresas de entretenimiento se tambalearan, y muchas otras, quebraran. Ahora era conocida como HYBE LABELS.

El padre de Yoongi era dueño mayoritario de Samsung, además, era accionista de un banco muy utilizado en Seúl, sin embargo, su madre era una idol, actriz, compositora, productora y modelo. Gracias a eso Yoongi tomó amor a la música y encontró al amor de su vida. Seokjin amaba el modelaje, por eso mismo, junto a Yoongi y fundaron una agencia de modelos, fortaleciendo los negocios que habían heredado, además de los "caprichos" que habían adquirido a causa de los berrinches de Seokjin.

-Mi Yoonie es toda una fiera en los negocios, no dudo en que hoy mismo traiga al chico que quiero para bebé.

Presumió, Jin a su hermano menor. Taehyung y él estaban acostumbrados a ese tipo de charlas, no eran mal intencionadas, eran con el fin de "divertirse".

-Mi Jungkookie haría hasta lo imposible con tal de verme feliz, así que apuesto que ahora mismo ha de estar cerrando el trato con nuestro próximo bebé.

-He estado esperando por él tanto tiempo, que el solo pensar que en cualquier momento puede estar aquí me hace temblar de la emoción.

-Te entiendo, hyung. Yo pensé que este momento nunca llegaría, no puedo esperar a tenerlo en mis brazos.

Los hermanos Kim soltaron un grito de emoción.

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-¿Te gustaría acompañarme a casa?

-¿Su casa?

-Sí, también va a ser tu casa, vivirás con nosotros.

Jimin no entendía cómo había terminado en ese dilema. Hace unas horas era pobre y desdichado y ahora mismo estaba escuchando la idea de un hombre tatuado pidiendo que aceptara vivir con él y su esposo, en la mañana había hablado con un hombre que le había pedido lo mismo. ¿A caso esto era una broma?

-Es que...

Jungkook lo observó, creía que era muy difícil para él tomar una decisión como esa. No lo presionó porque no era correcto hacerlo, era un niño, se veía que estaba desconfiando de él y no lo culpaba, tenían una hora de conocerse.

-Puedes pedirme lo que tu quieras, te lo daré, lo juro.

Jimin se sorprendió.

-¡OH! No, no, no, no es necesario. Yo... lo que quiero decir es que...

En ese mismo instante el doctor que lo estaba atendiendo entró, saludó al empresario y le sonrió a Jimin.

-Muy bien, Jimin, es hora de irte, ya han firmado tu alta y te han traído ropa.

Jungkook se desconcertó, estaba a punto de molestarse, pero se dijo a si mismo que eso no era lo correcto, podría asustar a Jimin y causar una mala impresión con el médico.