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Jimin se calmó al escuchar que iba a ser bañado, sorbió sus moquitos y cuando su mami lo dejó en el suelo de su habitación corrió hacia el baño para buscar el shampoo que había elegido con esmero.

-¿Mami, ete?

Preguntó sorbiendo su moquito, en cuanto regresó a la habitación, su mami estaba en el closet, escogiendo un pijama. Seokjin lo dudó, pero sinceramente ya no quería un nuevo berrinche, así que aceptó bañarlo con el dichoso shampoo. Preparó la bañera y desnudó a Jimin que se había mantenido tranquilo, y sin soltar el bote de shampoo, para su sorpresa.

Una vez listo lo metió a la bañera y comenzó por lavar el cuerpecito de su pequeño a lo que él jugaba. Un bostezo alarmó a Seokjin que su pequeño demonio estaba por hacer un berrinche si no se apuraba, pues Jimin no había tomado su siesta de ese día y todavía les hacía falta cenar. Por un momento dejó que su pequeño chapoteara en el agua a lo que él iba por unas cositas especiales para el momento estelar: lavar la cabeza de Jimin.

Aunque nadie o haya visto, Seokjin previno ese momento, sabía muy bien que Jimin no llevaba ese jabón de a okis, él querría utilizarlo porque le gustó e iba a hacer todos los berrinches posibles para que le cumplieran el capricho. Lo estuvo pensando mucho y llegó a la conclusión de que a él no le gustaría que le hicieran lo que planeaban hacerle a su pequeño, no quería verlo triste, enojado y mucho menos decepcionado por no cumplir un simple capricho. Jimin no solía ser exigente, ellos lo volvieron así y ahora debían pagar las consecuencias de sus actos.

Cuando conocieron a Jimin el joven era realmente humilde, sencillo, no veía el problema de cumplir sus caprichos. Su hermano, Yoongi, Jungkook y él habían nacido y crecido rodeados de caprichos. Ahora era el turno de ellos hacer feliz a Jimin complaciéndolo y comprándole todo lo que quisiera.

Regresó con una visera de baño, con figura de corona, esa era colocada alrededor de la cabeza de Jimin para evitar que el jabón se metiera en los ojitos de su pequeño. También llevó unos juguetes nuevos, unos lindos patitos que hacían diferentes gestos y aventaban agua.

-Listo amor, vamos a estrenar tu shampoo.

Le dijo mientras colocaba los patitos. Jimin aplaudió feliz, aunque su atención estuviera en los juguetes. Fue realmente difícil colocarle la visera a Jimin, pues a cada rato llevaba sus manitas a ella y tiraba con fuerza para quitársela.

-No, no, mi amor, esta es tu corona ¿A caso no quieres ser mi príncipe?

Seokjin hiso un puchero e imitó a Jimin en unos gemidos falsos que alertaban de llanto.

-Sí, mami, lo lejo.

Y siguió en lo suyo. Unas gotitas de Shampoo bastaron para hacer mucha espuma, el cuarto de baño se inundó con olor a frutos rojos, ahora entendía por qué le había gustado, no solo era el color, Jimin era un amante de los frutos rojos.

Con la regadera de teléfono comenzó a enjuagar el cabello de su bebé, hasta el momento ninguna gota de jabón había tocado sus ojitos.

-¡Mami, guta muto como ele!

-Sí, mi príncipe hermoso, sé que te gusta mucho el olor de tu jabón, solo espero que no se te hagan nudos o vamos a estar en problemas.

Siguió enjuagando y, a escondidas, colocó un poco de acondicionados para bebé. Enjuagó y cuando estaba a punto de sacar a Jimin de la tina, el pequeño golpeó el agua y un poco de espuma entró en los ojitos de su pequeño. Claro que los gritos no tardaron en escucharse, Dios, todo iba tan bien.

-¡Aaahhh! ¡Mami, mami ojitos!

-Ya voy, corazón, estoy en eso.

Decía mientras volvía a enjuagar a Jimin con la regadera de teléfono. Pronto los ojitos de su pequeño quedaron sin rastro de espuma, pero estaban rojos debido a la irritación. Seokjin envolvió a su hijo como un tamalito para evitar que se tallara los ojos y lo llevó hacia la habitación, ahí, Taehyung entraba en bata y Yoongi lo seguía solo con los pantalones puestos.

☆Mochi Compartido☆ ||BTS||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora