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Jimin no paró de mandar mensajes y hacer llamadas a su amigo, estaba preocupado, creía que algo malo le había sucedido, o peor aún, que estaba en manos de ese tipejo que se hacía llamar la ley. El resto de sus amigos ya habían ocupado una mesa, solo estaban esperando que él tomara asiento.

-¿Por qué no te sientas, Minnie? ¿Necesitas comprar algo?

Kai le cuestionó, Jimin se quedó callado antes de disculparse y salir corriendo en busca de su mejor amigo. Timo y Kai salieron detrás de él, las chicas y Soo se quedaron a esperarlos.

Jimin corrió desesperado, no tenía idea en dónde comenzar a buscar, tampoco tenía idea de los lugares que frecuentaba su amigo y, aun sabiendo, no conocía la escuela.

Hasta que escuchó risas que venían del baño de los chicos, su corazoncito se aceleró tanto que por un momento temió tener un paro cardiaco, corrió hasta abrir de manera abrupta la puerta de los baños y ahí, ahí estaba Zelo, encogido y llorando.

-Solo de nuevo... ¿Crees que ese pordiosero con el que llegaste te iba a salvar? Nooooooo. Porque esas sabandijas, por más dinero que les des, siguen siendo simples ratas. Apuesto que "tus papis" solo buscaron a tu remplazo.

-¡Déjalo en paz!

Exigió Timo, no podía seguir viendo a alguien tan miserable abusar de alguien más vulnerable. En cuanto obtuvo la atención de la basura, porque así se debería de llamar a la gente como ellos, Jimin corrió hacia su amigo. Kai y Timo se hicieron cargo de tirar la basura y dejar en claro que no importaba cuanta ley impusieran en la escuela, ellos no entraban en ella.

-¿Estás bien? ¿Te duele algo?

Zelo negó y abrazó a Jimin.

-Todo va a estar bien, ya verás. Me tenías muy preocupado.

Jimin hacía caricias en la espalda de su amigo, hasta se atrevió a dejar besitos en su cabeza, siempre que él se sentía mal sus papis hacían eso y creyó que también funcionaría con Zelo.

-Creí que me ibas a dejar.

-No, no, no, no, yo nunca te dejaría. Eres mi primer amigo, el mejor. ¿Recuerdas por qué queríamos estar juntos en la escuela?

-Pa-para hacer amigos.

-Sí, para hacer más amigos, no para dejar de ser amigos.

Zelo siguió abrazado a su amigo hasta que la tripita de Timo los interrumpió. El joven sonrió apenado.

-Lo siento, tengo hambre.

Jimin presentó a Zelo con los hermanos, claro que Timo no perdió el tiempo en hablar y cuestionarlo sobre lo que había sucedido.

-Que tal, es el primer día y ya tenemos enemigos. ¿Qué van a decir nuestros padres?

Dijo un indignado Kai. Zelo lo miró apenado y se disculpó.

-¡Oh! No lo digo por ti, lo que pasa es que esos tipos también molestaron a nuestro hermano Soo. Nuestros padres nos cambiaron de escuela porque Timo y Soo sufrían de bulling y a mí, porque yo siempre pateaba los traseros de quienes se atrevían a intimidar a mis hermanitos.

Charlaban camino al comedor.

-Pero mis papis dice que no debemos golpear a nadie.

Comentó Jimin, no lograba entender el tipo de convivencia en ese lugar.

-Minnie, no debes golpear a nadie, pero si ese alguien te golpea, vas a tener que defenderte.

Esa palabra dejó pensando a Jimin "defenderse" ¿estaba bien hacer eso? Regresaron al comedor y, a petición de Zelo, nadie mencionó nada de lo que había sucedido.

☆Mochi Compartido☆ ||BTS||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora