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Jimin pasó un buen día con sus abuelos, en la noche, los papis se encargaron de medicarlo. Ya antes lo habían hecho, así que esta vez fue más rápido. El pequeño de la casa lloraba con mucho sentimiento, ya no se trataba de vergüenza, sino de lo incómodo que se sentía el tener algo en la colita. Pero bueno, dejando eso de lado, la noche terminó con un rico postre, cortesía de la señora Min. Los padres no estaban de acuerdo, pero tardaron más tiempo en negarse que en lo que Jimin terminó con el postre.

Al otro día, al ser mitad de semana, debía ir a la escuela. Por primera vez Jimin lloró para no ir, para que lo dejaran quedarse en casa junto a sus abuelos, quería ir de compras con sus abuelas y pasear con los abuelos, pero Jungkook no le permitió faltar. El llanto siguió, por más que sus mamis le pedían que se durmiera o le retirarían su titi, él se negaba a cerrar los ojos.

Todos ya estaban en pijamas, en la habitación de la familia residente, solo estaban esperando a que el bebé de la casa cerrara sus ojos para poder ir a descansar a sus respectivas habitaciones. Jimin tenía miedo de cerrar los ojos y ya no verlos más, como pasó hace tanto tiempo. Sí los veía, pero solo por video llamadas, recibía sus regalos, pero eso no era igual a tenerlos junto a él, sentir sus mimos y ser malcriado por ellos.

-Mira, no nos vamos a ir. Nos quedaremos... mmmm ¿tres semanas serían suficientes?

Dijo la señora Min para convencerlo de dormir, era verdad que ellos se quedarían, de lo que no estaba segura era de hablar por todos, ella y su esposo sí podían quedarse, pero desconocía el itinerario de sus consuegros y tampoco quería ilusionar a su nieto. Jimin dejó por un momento su titi y negó.

-Cinco.

-Bueno, nos quedaremos cinco semanas.

Concedió el señor Jeon y el señor Kim completó.

-Y vamos a salir, iremos por ti a la escuela, regresaremos a casa para comer algo, te ayudaremos a hacer la tarea y nos iremos de rumba. ¿Qué te parece?

Jimin estaba a punto de asentir, cuando recordó la rutina que su abuelito había hecho.

-Eeh... ¿Papá? Ninguno de nosotros va por Jimin a la escuela, Hoseok y el chofer lo llevan y lo traen. Ya sabes... no quiere que sus compañeritos sepan de qué familia viene.

-¡¿Tú también, pequeño travieso?! Hijo de tigres pintos, a tus papis también les dábamos vergüenza. ¿Qué se siente? ¿Eeeh? ¿Qué se siente que tu propio hijo se avergüence de tu fino linaje?

Le dijo el señor Kim a manera de broma tanto a su nieto como a los jóvenes papis.

-Papá, sabes muy bien la razón, además, Taehyung y yo nunca negamos a la familia. Todo el mundo nos conoce desde que nacimos. Los que entran en esa categoría son Yoongi y Jungkook.

-¡Los rebeldes! ¡Claro! Tu papi Gigi siempre se metía en problemas, golpeaba a sus compañeritos, no hacía tarea y se dormía en sus clases ¿puedes creer eso, Mochi precioso?

La señora Min no perdió el tiempo en hablar.

-¡Mamá! Por favor, no le digas esas cosas a mi hijo.

-Pero es cierto, mi vida, por lo menos tres veces a la semana tenía que ir por llamados de atención.

-¡Agh! Ni me digas, Jungkook era igual. "Seora Jeon, su hijo no se presentó a clases, no hizo la tarea, no trajo el material que le pedimos" pero lo más frecuente era el: "Señora Jeon, encontramos a su hijo en el baño de las chicas haciendo cosas indebidas"

-¡Mamá! eso no era cierto, ellas me encerraban en los baños y no me dejaban salir.

Tanto Yoongi como Seokjin y Taehyung rieron bajo.

☆Mochi Compartido☆ ||BTS||Donde viven las historias. Descúbrelo ahora