Más allá de una App #1 [Saga Más Allá] ✅️ Borrador

CAPÍTULO 24: Te doy sexo y el mundo.

"Ahora como que cambiaron las fichas del juego."

(Alaia Coleman White)

Que pequeño es el mundo, por eso su actitud y sus nervios, ¡ha estado trabajando para mí y no lo sabía! A parte, creo que esa aplicación para mí y resultó ser mejor de lo que pensé.

Le sonrío y en serio que no puedo creerlo, sigo en shock, ahora si que ella me demostró que es una chica bastante capaz. ¿Cómo no me lo imagine antes? ¿cómo no noté que las veces que no contestaba o tardaba en contestar era porque estaba en mi empresa? Increíble su capacidad de guardar secretos.

—¿Ya se conocían? —pregunta Mary algo confundida.

—Sí, lo que pasa es que los padres de la Señorita Coleman son cercanos a mí, es por ello que la conozco, pero no sabía que usted se encontraba en mi empresa—Alaia me sonríe nerviosa, se le nota que le gusta.

—Bueno, eso es mucho mejor, me alegra que se conozcan y al menos se llevan bien—Mary abre una de sus carpetas y yo le hago un ademán para que las cierre.

—Vamos a comer algo, aperitivos, bebidas, lo que gusten. Yo pago—miro a senos hermosos quien mueve su cabello de un modo nervioso mirando el menú, se nota que no se esperaba esa reunión.

—Muchas gracias, señor Ferri—me mira y muerde sus labios disimuladamente.

—Leonardo para ti, querida Alaia, creo que de ahora en adelante nos llevaremos muy bien, un placer conocerla—pongo mi mano encima de la suya y la miro de manera comprometedora.

—Un honor para mí—me sonríe.

—Cuando comamos algo, vamos a hablar de tu puesto, un ascenso y sobre todo aumento de sueldo—ella abre los ojos asombrada y yo rio levemente.

—Muchas gracias—solo se limita a decir, vaya que Mary escogió bien y mira a quien.

Ordenamos algo de tomar, veo que ella en serio es una chica muy tímida, pero es demasiado inteligente. Cada día que pasa me doy cuenta lo mucho que la amo y no creo que este sentimiento se apague.

Mientras llegan nuestros pedidos, vamos hablando de lo que nos compete, aunque ahora mismo tengo unas ganas de arrancarle esa hermosa falda. Miro detenidamente esa camisa que lleva y, ¡es la camisa que le di el día que peleamos! Se ve jodidamente sexy esta mujer.

—Bueno, señor Ferri, dijo que tiene algunos temas que tratar conmigo, aparte de que quería saber quién fue que creó y dio vida a su exitosa aplicación—su manera de expresarse me deja embobado, ya me imagino follándola en mi empresa, que delicia.

—Ya le dije que puede llamarme Leonardo—hago una pausa y retomo—Sí, le dije a Mary que estaba interesado en conocer la mente maestra de esa aplicación, personalmente quiero darle mis felicitaciones, veo que tiene mucho detalle y que todo lo que se propone lo hace bien—posiciono una de mis manos entre su falda y siento como su piel se estremece.