Good Love

Parte 35

⚠️ADVERTENCIA⚠️
Es súper raro de que yo ponga advertencia jajaja pero, es porque habrá escenas +18 un poco más explicitas de lo que normalmente suelo ser. Sé que hay a quienes les guste y también sé que hay personas a las que no, así que. Si ese tipo de contenido no es de tu agrado, estás a tiempo para dejar de leer jeje. Advertidas están 😂. Sin más que decir, disfruten el capitulo.

Parte de reconciliación

Ambos chicos llegaron de comer. Estaban tan llenos que decidieron recostarse, pero ambos eran tan dormilones que después de 5 min en el sofá, cayeron en el más profundo de los sueños.

Después de varias horas, el primero en despertar fue Mew. Abrió los ojos y vio que la oscuridad los invadía, miró el reloj en su muñeca "20:00" sólo los alumbraba la luz exterior que lograba colarse por la ventana. Se quedó sin moverse y plantó un beso en la cabeza del menor, que se encontraba sobre el mayor abrazándolo por completo. El beso provoco que el menor despertara, y confundido ante la oscuridad que los invadía, por fin dio con la mirada del mayor cuando miró hacia arriba. Se topó con una mirada que estaba llena de deseo. Parecía por un momento como si el mayor estuviera enojado, pero una vez que prestaba atención a su mirada profunda, pudo darse cuenta que no era de enojo, era puro y completo deseo.

— Phi...
A penas pudo alcanzar a decir algo cuando el mayor lo jaló con fuerza bruta para besarlo. Sus manos acariciaban de arriba a abajo todo lo que alcanzaba del cuerpo del menor.

Gulf había escuchado por muchas veces que el sexo de reconciliación era el mejor sexo, y estaba a punto de comprobarlo.

Se acercó cada vez más a Mew, hasta lograr levantarse un poco para sentarse a horcajadas sobre él. En cuanto se sentó pudo sentir como el miembro de la persona debajo de él estaba increíblemente duro. Poco a poco el menor comenzó a mecerse en un va y ven sobre de esa erección, disfrutando por completo del beso y la sensación que dejaba en su propio pene el roce con la semi roca con la que lo frotaba.
— aahgg – un gemido de placer por fin escapó de su garganta.
Mew seguía en silencio y con esa mirada penetrante que lo miraba con gran deseo cada que se separaban del beso. El mayor llevó sus manos hacia las caderas del menor y tomó el final de su camisa y lo fue subiendo poco a poco. Cada parte de la piel de su pecho que iba quedando descubierta, era parte que el mayor iba atacando con suaves besos que su vez eran una combinación entre mordiscos y lengüetazos que pasaba por la parte que iba mordiendo.

— ¡auch! — exclamó el menor a la primera mordida.

Pero el mayor no dijo nada, simplemente se detuvo un momento y subió su mirada hacia el chico encima de él, quien le dio una sonrisa, indicándole que siguiera avanzando por su piel desnuda.

— Te deseo tanto — manifestó por fin el mayor
— ¿por qué dejaste de besarme? — preguntó Gulf insaciable

Una ligera sonrisa se dibujó en el rostro del mayor y de pronto lo tomó con ambas manos del trasero para levantarlo junto con él del sofá.

— ¿A dónde me llevas? — preguntó el menor curioso
— Voy a castigarte... mientras de devoro — declaró el mayor con depravación en sus ojos.

El menor fue llevado hasta la mesa del comedor y de un sólo golpe el mayor aventó todo lo que estaba sobre ella, unos cuantos manteles y algunas decoraciones. Era una mesa mediana y pesada de parota, con una longitud que difícilmente era más larga que la altura del menor. El castaño lo recostó sobre la mesa y al dejarlo también dejó en el una dulce y tierna caricia en su cabello.
— No te muevas... — le exigió

El menor ni siquiera quiso saber de qué se trataba, sólo vio como el mayor desapareció de su vista, mientras él quedaba boca arriba mirando el techo y la lámpara que colgaba sobre él.