Good Love

Parte 12

Parte 12: La incertidumbre.

Mew salió corriendo después de cinco minutos de estar en completo shock. Pero bajó y Gulf no se veía por ningún lado. Se acercó al guardia de la puerta para preguntar si lo había visto, a lo que el guardia le contestó que en cuanto bajó tomó un taxi. Mew iba a volverse loco, eran pasada de las doce de media noche. Si la mamá de Gulf se enteraba que se había ido sólo lo mataría. Además Gulf había dicho que se quedaría a dormir con Mew. Si llegaba a casa a estas horas, ella sospecharía que algo malo había pasado. Comenzó a buscar su telefono en el bolsillo de su pantalón y con las manos entorpecidas, marco el numero de Gulf.

- ¿Gulf? ¿Gulf? - dijo desesperado cuando por fin el chico contestó

- ¿Qué pasa Phi?

- Por favor, detén el taxi y regresa.

- Pero, ya voy muy lejos - dijo Gulf confundido.

- Gulf, Nong, por favor, te lo ruego, pide al taxi que regrese.

Hubo un largo silencio, donde Gulf se debatía si era buena idea volver o no.

- Lo haré Phi. - dijo esto último y colgó la llamada.

Mew se quedó en el estacionamiento, desesperado, dando vueltas de un lado para otro. A lo lejos logro ver que un auto se acercaba. Se acercó rápidamente para pagar el taxi. Gulf bajó y se notaba confundido, pero tranquilo. Ninguno de los dos hablo en el trayecto del estacionamiento a la entrada del edificio. Ambos dieron las buenas noches al guardia y se adentraron en el elevador. Ahí dentro el silencio siguió. De pronto sus miradas se cruzaron y fue como si una mecha se hubiera encendido en ambos. Chocaron con torpeza al voltear y juntar sus cuerpos abrazándose fuertemente. Ambos chicos comenzaron a besarse desesperadamente. Ya no había absolutamente besos suaves o lentos. Sus bocas estaban comiéndose la una a la otra con urgencia. El sonido de que el elevador había llegado al piso del departamento de Mew los sacó del trance en el que estaban. Ambos chicos se incorporaron, salieron del elevador y caminaron hasta el departamento. Una vez ahí dentro, cuando la puerta se cerró detrás de ellos. Gulf saltó sobre los brazos de Mew para seguirlo besando. Se impulsó con sus brazos al rededor del cuello de Mew, esperando a que éste lo levantara. Mew no perdió tiempo y lo levantó con fuerza y Gulf se ayudo para mantenerse arriba rodeando la cintura de Mew con sus piernas y apretando con fuerza. El menor besaba el cuello de Mew, como si fuera un chico perdido en el desierto y Mew fuera el oasis que acaba de encontrar. El mayor caminó con el chico entre sus brazos para llevarlo hasta la habitación, se sentó sobre la cama con Gulf aun encima sin dejar de besar su cuello. En cuanto Gulf sintió que habían dejado de moverse, movió sus manos hacia el rostro de Mew y se le quedó mirando unos segundos, le dio una pequeña y rápida sonrisa y volvió a besarlo suavemente en los labios.

Mew tenía tantas preguntas. Pero también se cuestionaba si era el momento para hacerlas. Sólo disfruta por una maldita vez Mew, no lo arruines. Pensó para sí mismo.
Gulf fue empujando a Mew poco a poco para que se adentrara más a la cama, y cuando no pudo avanzar más, sin dejarlo de besar lo inclinó para que se recostara por completo en la cama. En esta posición Gulf tenía completo acceso a todo el cuerpo del mayor, y cuando se movió un poco para acomodarse mejor, pudo sentir algo duro que rozó su trasero. No es que el chico fuera inocente, para nada, de hecho él mismo venía sintiendo desde minutos atrás como su propia erección iba creciendo. Pero era muy diferente para él sentir su propia erección crecer, a sentir una erección ajena rozando su parte trasera. Gulf se detuvo en seco y miró a Mew un poco asustado. El mayor por fin pudo respirar y supuso que el chico se había alejado al sentir su erección. Lo estaba temiendo desde que empezó a sentirla crecer debajo de sus pantalones. Por un momento se sintió tímido y desvió la mirada de la de Gulf. El menor al ver esto, tomó su rostro forzando a que lo mirara de nuevo.
– Es sólo... que todo esto es nuevo para mí... sobre todo eso. – le dijo también apenado mientras dirigía su mirada a la parte baja de Mew.
– ¿Nunca habías sentido un pene duro? – respondió Mew un poco más relajado al ver que menor había empezado una conversación sobre el tema sin hacer la situación tan incomoda.
– No, fuera del mío propio – dijo sin poder aguantar la risa.

Lo cual hizo que Mew también rompiera en carcajadas. Gulf dejó caer su frente sobre el pecho de Mew sin parar de reír. Cuando por fin pudo parar, giró su rostro y acomodó su oreja cerca del corazón de Mew.

– Está latiendo muy rápido – dijo con una voz tan dulce, casi inocente.
– Es porque hace unos minutos no me dejabas respirar – contestó Mew bromeando.

Mew amó ese panorama que esta observando. Lo estaban hablando poco a poco, estaban bromeando al respecto, aún no abordaban el tema de lleno, pero por algo se empezaba.

– Gulf...– dijo por fin Mew, con un tono de voz que advertía que la diversión estaba por acabar.
– shhh shh shh – Gulf puso el dedo indice sobre la boca del mayor para callarlo.
Bajó de su cuerpo para ponerse de rodillas en la cama. Mew quito suavemente el dedo del menor y se apoyó con sus dos brazos para levantarse y quedar sentado en la cama junto a Gulf.
– Aunque no quieras, tenemos que hablar – dijo Mew en tono serio.
– ¿Podemos mejor hablar otro día? Yo solo quiero seguir besándote – dijo Gulf acercándose rápidamente a Mew para intentar jalarlo a un nuevo beso.
– No, espera – Mew dijo retrocediendo un poco, logrando librarse del beso.

Mew empezó a dudar si debía abordar el tema. Él también quería seguir besándolo. Pero también quería y se moría por saber qué era lo que estaba pasando. Por más que lo intentara, no podía sacar de su cabeza la frase que el menor le había dicho antes de salir huyendo. "Yo en verdad me moría por hacer esto". Por más que intentara no pensar en ella, atacaba en su subconsciente una y otra vez.
Ambos chicos al mismo tiempo empezaron a sentir sus celulares vibran demasiado y muy seguido. La confusión de ambos, fue como una salvación al silencio que se estaba generando entre ambos. Los dos chicos abrieron su celular para revisar que era lo que estaba pasando.
– ¡Oiiii Mew! – saltó Gulf sorprendido – ¿estás viendo lo que está pasando?
Volteo a ver a Mew con la cara completamente asombrada.
– ¿Que somos tendencia 1 en Tailandia? – dijo feliz, pero no tan sorprendido como Gulf.
Después de todo tenían desde el episodio 4 siendo tendencia 1 en Tailandia cada que salía uno nuevo episodio.
– ¡No Phi! Mira bien... – le dijo esto acercándose a rastras hasta Mew – Somos tendencia #1... mundial – dijo esto último mostrándole su propio celular.
– ¿Mundial?
Mew arrebató el teléfono de Gulf e hizo cara de enfocar con sus ojos.
De pronto el celular de Mew empezó a sonar.
– Es Boss – le enseñó a Gulf, como pidiéndole permiso o consultando con él si debía o no contestar.
– Contesta, contesta, de seguro es por lo mismo.
Mew atendió la llamada de un manager completamente sorprendido al igual que ellos. Gulf se quedó en la cama con el celular viendo todas los tweets que había sobre el episodio. Simplemente era algo increíble, todo el esfuerzo se había visto reflejado y se sintió orgulloso de ver que sus fans habían sentido con ellos cada momento que habían querido transmitir.
Mew había salido de la habitación para hablar con Boss. Cuando volvió al cuarto, miró al menor que se había quedado dormido con el celular caído en sus manos sobre su pecho. El mayo se acercó y lo acomodó un poco. Retiró su celular y lo colocó en la mesita de noche.
– Dulces sueños Nong... aún tenemos una platica pendiente, no creas que te vas a escapar.
Le susurró a esas pequeñas orejas que tanto le gustaban, para después besar su frente y acurrucarse a su lado para dormir.

// Holis de nuevo!! Ahora sí me pasé y lo hice super cortito. Pero es que normalmente escribo en la compu, pero mi gata se le ocurrió morder el cargador 🙃JAJAJA y ya no carga, así que estuve escribiendo en el celular 😣 así que perdón también si hay
Faltas de ortografía o errores en palabras. Muchas gracias a los que comentan y votan, cada que leo comentarios me pone muy feliz ♥️ //