No Estoy Obsesionada -Klaus Mikaelson

Capitulo 3

Narra Kaia.
Era de madrugada y Klaus aún no dejaba su escándalo del porqué lo había secuestrado.

-¿Podrías callarte ya? Voy a explicarte.

Klaus: Me escucharán y vendrán a buscarme, te doy unas horas para que estés muerta.

-Lindo, el búnker está blindado y hechizado para que nadie pueda verlo, solo al que yo se lo permita.

Klaus: ¿Que eres?

-Una mortal como cualquier otra y te traje aquí porque quiero que me cuentes todo sobre el mundo sobrenatural.

Klaus: Te aseguro que se me libero de aquí, no quedarán ni tus órganos.

-Deja de lanzar amenazas en vano, saldrás de aquí cuando yo quiera.

Klaus: Una mortal como cualquier otra no puede retarme a mí.

-Cariño y hasta te he secuestrado, después de todo no eres el poderoso Klaus que creía.

Klaus: Necesito sangre.

-Te daré un frasquito todos los días, tú verás como sobrevives con eso.

Klaus: ¿Puedes quitar está reja? No soy un perro para estar ahí encerrado.

-De acuerdo. -Me acerqué al botón que abría la reja.

Klaus: ¿No te da miedo que te haga daño?

-El miedo lo perdí hace tiempo. -Presioné el botón que abría la reja pero este salía con temor, como si se tratara de una trampa.

Klaus: ¿Es todo? ¿Me dejaras salir?

-Ya abrí la reja. -Salió y me acorraló en la pared tomándome del cuello.

Klaus: ¿Dime qué hago aquí?

-Te diría que esto es excitante pero arruinaría el momento.

Klaus: Lo siento amor pero tengo que poner mi vida primero. -Me metió en la habitación donde antes lo había encerrado a el y cerró la reja.

-¿Puedes pasarme una revista? Voy a morir de aburrimiento aquí. -Dije sentandome en el sofá que había ahí.

Klaus: ¿No te importa que te haya encerrado ahí? -Me miraba sorprendido, creo que le parecía increíble que alguien no le tuviera miedo y tuviera tan poca preocupación por morir.

-No hay forma de que salgas de este búnker, tarde o temprano terminarás sacándome de aquí. -Las rejas y las puertas también se activaban con mi voz así que podía salir de aquí cuando quisiera.

Klaus: A ver qué tenemos aquí. -Empezó a caminar por el búnker.

-Abrí rejas. -Dije y estás se abrieron.

Klaus: ¿Cómo puedes hacer eso? ¿Eres bruja?

-Amor, bienvenido al mundo de la tecnología. Ahora no toques mis cosas y vuelve a esa habitación.

Klaus: No volveré si no me explicas porqué me trajiste aquí.

-Ya te lo dije.

Klaus: ¿Por ese capricho?

-Si y pasaremos un largo tiempo aquí, así que es mejor que nos llevemos bien. Aquí tienes ropa y todo lo que necesitas y si quieres algo más, puedes decírmelo.

Narra Klaus.
Está chica parecía una mente maestra, tenía todo tipo de computadoras y demás cosas aquí, es muy guapa y tiene algo que llama mi atención pero aún no confío del todo que ese sea el motivo por el cual me trajo aquí.

Kaia: Luego te traeré sangre, puedes ponerte cómodo y dentro de la habitación hay un pequeño botón que despliega unas cortinas para que yo no vea mientras te cambias.

Klaus: Pero te gustaría hacerlo.