En tan solo unas horas comenzaría la final, por ese motivo, Simmer nos había llamado a todos a un salón reservado del hotel. Por lo visto, deseaba que entrenáramos antes de, muy posiblemente, perder.
—En las últimas batallas nos fue mal, pasamos a las finales con lo justo —dijo con tono decepcionado. Me contuve de rodar los ojos solo porque estaba a dos metros de él y no había nadie en frente mío para cubrirme—. Vamos a repasar algunas de sus tácticas ahora, para ver si podemos perder con dignidad.
Observé a Silas, que no despegaba sus ojos marrones de mí. Me estaba insistiendo sin decir ni una sola palabra.
—¿Puedo sugerir algo? —cuestioné hacia Simmer.
El entrenador suspiró.
—Vamos a perder, así que sí, ya no importa.
—Al tener tantos entrenadores a lo largo de mi vida, aprendí varias técnicas que podrían ayudarnos a ganar —murmuré y me paré en el centro—. Algunas nos ayudarán a perder menos energía con los ataques, otras a manejar mejor las habilidades, y disminuir el tiempo de reacción, como lo hice en mi batalla individual contra los de los de la escuela de Asmot.
Mis compañeros de equipo no dijeron nada, pero tampoco se mostraron felices.
—Ilústranos —concedió el entrenador.
—Silas —lo llamé y él se paró frente a mí—. La primera técnica que deben aprender es a dejar el canal de sus habilidades abierto.
—Eso no es posible —me interrumpió Rhys.
—Sí lo es, solo deben llamar al poder, dejarlo listo para utilizar, pero sin darle la orden que le indica qué habilidad van a utilizar —expliqué de la misma manera que lo había hecho con Silas semanas atrás—. Vean, Silas, me va a atacar, yo no sé con qué, así que debo prestarle atención para poder elegir mi contraataque.
Silas me observó a los ojos y frunció su ceño, concentrado. Sentí como su poder se abrió paso, así que yo también le permití a mis habilidades activarse, luego, él me envió una descarga eléctrica que atrapé antes de que pudiera llegar a mí y se la lancé de regreso. Él la esquivó y ambos desactivamos nuestras habilidades.
—Voy a probar yo —anunció Oliver y empujó a Silas a un lado—. ¿Cómo lo hago?
—Solo debes dejar que el poder siga su curso, cuando está por salir, lo retienes en su lugar sin especificarle qué forma tomar —intenté explicarlo de otra manera. No era fácil, las habilidades funcionaban diferentes en todos.
—Bien, tú me atacas y yo respondo —pidió.
Y eso hice, activé mi poder y le lancé una llamarada de fuego que él logró apagar en menos de tres segundos con una pared de agua. Sus ojos se abrieron con asombro.
—Y esa solo es una de las técnicas. Puedes hacer lo mismo que recién, pero gastando menos energía —anuncié y todos me prestaron atención, incluido Simmer—. Deben fraccionar sus habilidades en sus mentes, separarlas en pequeñas cajitas imaginarias, así, cuando las utilizan, pierden menos poder, porque ya no van a dejar un residuo —expliqué y la mayoría frunció el ceño, confundido.
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La sombra oculta (completa)
FantasyUn ser la acompaña desde pequeña. Un ser que se hace llamar su asociado. Un ser que parece conocer todos los secretos del universo: la sombra. *** Maia no tiene recuerdos de su verdadera familia. Según ella, nació y se crio en la calle, oculta entre...