Un Error Imperdonable [Cinco Y T/n]

09. Entrenamiento.

Al día siguiente tocab entrenamiento, y Cinco estaba un tanto preocupado. Puesto que temía lastimarse, gracias a que tenía sus brazos cubiertos de heridas.

— Número Cinco y número uno es su turno.

— Esto no tendrá un buen final —murmuro Klaus para si mismo.

— Muy bien, Cinco. Veamos de que estás hecho —dijo Luther mientras se ponía en posición.

Todos estaban en un silencio sepulcral observando, hasta que el sr. Reginald dio la señal para empezar.

— Ahora que te tengo de frente quiero confesarte algo... ¿Jamás te pusiste a pensar en quien le dio la idea a papá para que te fueras?

— ¿Fuiste tu? Le metiste ideas para que me sacaran.

— Veo que no eres idiota, escúchame bien, si pude sacarte una vez puedo hacerlo de nuevo, te sacaré de aquí de una vez por todas —tiro un golpe, pero Cinco lo esquivo.

— ¿Que te hace pensar que me dejaré ganar, Luther? Te agradezco que le hayas dado la idea a Reginald, créeme.

Cinco consideraba que, el alejarse de las personas que te hacen daño, es la mejor decisión que podía tomar, sea quien sea.

— Vanya dile a papá que se detengan, sabes que Cinco tuvo un accidente, es malo entrenar es esa situación —suplico Klaus mientras se acercaba a la castaña.

— No puedo, papá me regañara.

— Esto es increíble —regresó a su lugar molesto.

— Vamos, Cinco. ¡Defiéndete! ¿No estas molesto porque te saque o sigues siendo un cobarde? —tiro un golpe, pero nuevamente fallo.

— Gastas demasiada energía, no sabes esperar, ¿Sabes cual es la diferencia entre tu y yo? Que yo no soy un idiota impulsivo, en cambio tu... eres eso y mucho más.

— Tengo que hablar con papá para que se detengan —murmuro Klaus para después caminar hacia su padre.

— ¡Vamos Cinco! ¿No puedes o sigues siendo el mismo de antes?

— Luther ya basta... No quiero hacer esto, me estoy cansando de tus comentarios hacia a mi.

— Te confesare algo... yo puse unas pastillas que debilitan tus poderes por eso no podías usarlos.

Este comentario hizo que Cinco se enojara y lo golpeara una sola vez, pero con la fuerza necesaria para que Luther cayera al suelo.

— Me retractó... no hará falta que hable con papá —murmuro Klaus sorprendido.

— El entrenamiento termino, Número Cinco gana —agrego Reginald orgullosamente para después irse del lugar.

— ¡Estás muerto! —grito levantándose del suelo.

Luther iba a golpear a Cinco, pero no pudo cuando esté se movió haciendo que Luther cayera al suelo nuevamente.

— Te dije que me dejaras tranquilo —agrego Cinco yéndose del lugar de entrenamiento con sus manos en sus bolsillos.

— Te humilló —agrego Diego en carcajadas.

— ¡Cállate y ayúdame a levantarme!

[▪︎<🥀>▪︎]

Mas tarde, desde el entrenamiento, Luther y Cinco no se habían cruzado, y ya era hora de la comida.

— Es increíble que pienses que por un entrenamiento que ganas crees que ya eres el mejor de la academia.

— Te vencí a ti Luther... Con eso me basta y es suficiente para ser feliz.

— ¿Crees que eres mejor que yo?

— Luther basta —agrego Klaus intentando calmarla incomoda situación.

— ¡Responde! ¿Crees que eres mejor que yo? Porque si lo piensas estás equivocado —sonrío sarcásticamente.

— No me creo mejor que tú número uno... ¡Sé que lo soy!

Este comentario hizo que la sonrisa se le borrará del rostro a Luther y que todos empezarán a reír.

— ¿Que sucede aquí? ¿Porque no estás en tu asiento, número uno?

— Por nada... —dijo mientras miraba a Cinco en forma amenazante.

Victorioso, a Cinco se le formo una sonrisa de oreja a oreja.

Esa noche, todos estaban en sus habitaciones, menos ocho quien decidida fue a la habitación de Cinco.

▪︎ Corregido 🥀.

▪︎ Hi una cosa, este libro no es convencional. Se que el título dice "Cinco y t/n" y eso es porque son la pareja PRINCIPAL, lo que pase de ahora en adelante son las consecuencias de las malas decisiones. POR FAVOR NO DECIR COMENTARIOS HIRIENTES DEL FINAL. Puesto que no voy a quedarme sin responder a ellos.