La Subordinada de Takemichi Hanagaki

Normal

Ver a Mikey y Draken en mí casa cada vez era más común, al punto de que no me sorprendía si llegaba y ellos ya me esperaban en la puerta de mi hogar, tampoco estaban fuera de lugar las peleas entre el Manjiro y Yenmi, quienes discuten por todo o nada, siendo la pelea parada ya sea por la chica o por Draken antes de que esta pasase a situaciones mayores.

Pero no estaba listo par ver era a los dos individuos que se odiaban a muerte compartir el mismo espacio, eso no era lo raro, lo raro era ver como la de cabellos plateados jugaba con el cabello del rubio como si nada, ella ya tenía unas coletas mal hechas en su cabello color plata, y ahora era Mikey quien estaba en ese proceso con ligas de colores y demás, ambos tan tranquilos que era imposible de asimilar para el ojo humano.
No era el único en esta situación, Draken quien estaba a un lado de ellos se removía incomodo en su lugar por la cercanía de los dos junto a él, y lo repito, no es normal esto. 

Aunque bueno, qué podía yo considerar normal si viajo entre el pasado y futuro, así que, ¿quién soy yo para juzgar?. Divertido por la situación sacudí mi cabeza de lado a lado para deshacerme de esos pensamientos banales y sentarme junto a los chicos y tomar una liga. 

—¿De dónde sacaron esto?— Pregunté mientras jugaba con las ligas calmadamente, hubo un silencio que me obligo a mirar a ambos.

Ellos dejaron de moverse y el silencio fue sepulcral, ninguno de lo do decía algo y yo alcé una ceja extrañado y luego mire a Draken quien alzó los hombro mientras negaba con la cabeza en seña de que el no sabía o entendía la situación que estaba pasando en este momento, luego ambos nos miraron serios, e instintivamente supe que sería algo sin importancia pero sus quejas durarían un buen rato, y al parecer no era el único que pensaba lo mismo ya que el del tatuaje soltó un suspiro pesado. 

—Son de Emma— soltó como si nada y yo alcé la ceja confundido ante la mención de ese nombre el cual se me hacía conocido.

Y tan pronto como dijo ese nombre, una vena se marco en la sien de Draken quien ahora se notaba molesto por las accione de los menores (o mayores, ya que Yenmi es mayor pero a la vez menor, porque bueno, viene del futuro pero tiene la misma edad que ellos, esto es tan confuso, incluso el hecho de que bueno, ahora la chica existía en el futuro y era tan retorcida), y le quito las cosas de las manos para después levantarlas lejos de su alcancé, o eso creyó el porque mi ahora prima se levantó con simpleza y alcanzó el bote de ligas y adornos para el cabello y así poder seguir peinando al chico. 

Luego de un buen rato y un sermón sobre porque no había que tomar las cosas de la hermana de Mikey, si me enteré de que e su hermana recién, ahora no solo el cenizo y la de cabellos platas se encontraban peinados con ridículas coletas y chongos mal hechos, sino que también Draken estaba de esa forma. 

Que buen momento, tanta calma. 

Me levanté rápido de mí lugar y busque entre mis cosas bajo la atenta mirada de los tres curiosos detrás de mí, al encontrar el objeto de mí búsqueda me voltee y apunte hacía ellos. 

—¡Sonrían chicos!— Grite mientras llamaba su atención y tomaba una foto de aquellos tres, luego de eso el trío brinco sobre mí a exigirme que borrara la imagen. 

Gracias. 

¿Han escuchado el dicho de la calma antes de la tormenta? Bueno pues créanlo porque es lo que les voy a hacer en un futuro, les aviso para que no sufran tanto. 

🦋✨