De alguna forma u otra me vi involucrada en los viajes en el tiempo a mí edad de 16 años durante el año 2017.
Yo notaba los cambios, los demás no.
Y finalmente di con Hanagaki Takemichi, quien estaba haciendo de las suyas con la línea temporal, y co...
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Todos corrían con prisa a sus motocicletas mientras yo caminaba a paso lento mientras apretaba mi playera en mi herida, Takemichi fue el primero en acercarse a mí corriendo y yo solo sonreí sin importancia, estás eran cosas que pasaban.
—Ey, tranquilo, lleva a tú novia a su casa, yo dejaré que uno de los chicos me lleve al hospital— sonreí mientras le revolvía el cabello y camina a donde estaban los demás.
El rubio nos miro dudosos pero Draken solo asintió con la cabeza y miro a la otra niña bonita.
—También lleva a Emma a su casa, debe de descansar, por favor— dijo con un notable tono cansado.
Asintió firmemente con la cabeza mientras extendía su mano a donde estaba la rubia y está la tomaba con duda mirando al del tatuaje quien solo le sonrió con amabilidad indicándole que todo estaba bien. La de ojos color miel solo asintió con la cabeza y salió del lugar con la castaña y el rubio dejando solo a los altos mandos de la ToMan y a mí.
—Peeeeeh, me voy a morir, me gustas— y el peso de mis parpados se hizo mucho, ahora caía al suelo mientras veía en cámara lenta como los chicos se acercaban a mí.
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Caminaba con Emma y Hinata a sus casas, la de Tachibana quedaba más cerca así que la iría a dejar a ella primero y luego a la hermana del líder de la ToMan, aún así la angustia no me abandonaba en ningún momento, tenía la sensación de que esto no era la primera vez que pasaba y no me agradaba esa idea.
Sin notarlo mi celular estaba en mí mano bajo la atenta mirada de la rubia, hace minutos mi novia había subido a sus departamentos, y el móvil estaba marcando a un número desconocido.
—¿Hanagaki-san?— Era un chico, lo sabía por el tono de su voz pero era lo único que podía descubrir en este momento.
—Apuñalaron a Yenmi, está camino al hospital, yo iré después, tengo algo que hacer primero— las palabras salieron tan natural de mí boca mientras era observado por Emma con asombro, tras eso la llamada se corto, el otro lado de la línea había abandonado nuestro intercambio de palabras primero—. Vamos, iré a dejarte a tú casa y luego al hospital, si no llegas bien tal vez Mikey-kun me arranque la cabeza.
Dije con naturalidad y la chica soltó una pequeña risa para luego asentir con la cabeza, tal vez esto no sería tan difícil como espero.