EL AMULETO CENTRAL DEL UNIVERSO - EL PORTADOR CONTEMPORÁNEO VOLÚMEN I

Cap 34 Sospecha indescriptible

Después de una "aventura corta" diría yo, siendo una testigo de lo que no hace mucho me contaron. Sobre un mundo paralelo diferente al nuestro. Me sentí no en mi lugar, sino en un asiento diferente al de una persona que ya lo ha tomado antes.

Dormí temprano después de la cena de la noche anterior, sabía que tendría clases y deberes por hacer, sin embargo mi mente estaba enredada de extremo a extremo. Ya ni sabía en qué lugar estaba parada. Siendo sincera conmigo misma, no sabía por qué hacia eso o por qué estaba ahí solo sabía cuál era la idea principal del recorrido. Hanabira solo me mostró la primera parte de mi descubrimiento solo tendría que esperar hasta tal punto de finales de verano para saber que es lo que quiere enseñarme ese chico.
Hace tiempo que no escribia la palabra "descubrimiento" la primera vez fue cuando describí como me sentí el primer día de clases en Japón, solo han pasado meses y ya se me hace eterno. ¡Que gracioso!

Cómo siempre, tomé mis cosas que debería de llevar en mi mochila me puse los zapatos y me dirigí a la escuela, me despedí de la señora Fuyuka y la puerta la cerré lo más suave posible para hacer sentir a la señora Fuyuka que estaba bien irme sola. Solo la cerré y varios chicos a unos diez pasos de mi ya estaban listos para ir a clases y comenzar el día.

Yo me sentía un poco cansada, en el camino recordé sobre las gemas que Hanabira me había dicho, me dejó en sospecha como tenía esa inteligencia natural en su manera de mostrar un camino en la oscuridad a mitad de la media noche. Eso me ha una dado muchos escalofríos que no había aguantado la caminata y decidí solo pensar en comer.
Entre a los terrenos del instituto y la profesora Kioshi de pelo dorado y piel bronceada daba los buenos días a los estudiantes que pisaban los terrenos de la escuela, dándoles una linda sonrisa animadora para ganar energía para un día completo, eso es lindo de ver. Puse mi mochila en mi pupitre y el primer compañero que había llegado era Taro. Ese chico que siempre se la pasa leyendo, sentado en la fuente en medio de la plaza central escolar me saludo y llegaban más chicos y chicas. Unos que eran de la clase 3-1 nos veían y pasaban entre las puertas saludandonos hasta desaparecer entre las paredes de la oficina del director.
Poco despues llegó Miyuji tendiendo su misma expresión triste, pero mejor que antes. Me acerque y le toque el hombro por atrás, le pregunté cómo seguía con sus heridas solo asintió que estaba mejor que nunca cuando ella estaba mintiendo para no tener angustia por ella. Miyuji era el centro de atención en esos días después del susto que las chicas de la otra clase provocaron a los demás. Tuve que animarla lo más que podía, no quería que por el acoso que recibe se convierta en una persona que no es realmente, a la Miyuji que conozco

- ¡Buenos días jóvenes, está semana estaremos trabajando muy duro con un nuevo proyecto semestral! ¡Les escribiré las nuevas ideas que llegaron días atrás para su proyecto, levantarán la mano conforme decidan el tema que estudiarán! -- La profesora Hana escribió ideas de temas relacionados con la filosofía en general, todo lo que tenía que ver con el universo se tendría que estudiar, solo que nosotros decidiremos que tema estudiar, escribió en total más de quince ideas con gises color rosa y amarillo, el tema central de blanco. Nos pidieron hacer equipos de cinco integrantes, ya que somos veinte en total se crearían cuatro grupos para el proyecto semanal, nos unimos pero Miyuji no tenía equipo, eso a causa de la impresión que causó con su comportamiento y su físico, por lo que uno de los chicos le pidió a Miyuji que se incorpora en el nuestro ya que solo tenían que ser cinco. Miyuji repitiéndose varias veces al final resultó contestar agresivamente y es cuando decidido hacer sola.
Me rio pena ver a Miyuji conportarse así, me puse triste por ella. La chica que conocí por primera vez no es la misma que está sentada en aquel pupitre de mi izquierda a tres bancas de mí, solo trabaje con los chicos y decidimos ideas relacionadas al tema. Paso la hora de las clases de la mañana y llegó la hora del almuerzo. Hablé con Miyuji, pero ella solo salió sin responderme dándome la espalda, Musume me miró seriamente sin quitar sus ojos de encima, después se retiró y es cuando decidí hablar con ella. Siendo la Musume que conocido no cambio en absoluto