chapter 047

3.8K 156 28
                                    

imagina que tienes una hija y bucky no lo sabe.

la tarde helada de otoño climatizaba la ciudad neoyorquina en pleno noviembre, mirando las últimas hojas naranjas de los árboles suspiraste sintiendo el frío recorrer tu pecho, para luego exhalarlo abriendo tus ojos, en paz, realmente extrañabas l...

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.

la tarde helada de otoño climatizaba la ciudad neoyorquina en pleno noviembre, mirando las últimas hojas naranjas de los árboles suspiraste sintiendo el frío recorrer tu pecho, para luego exhalarlo abriendo tus ojos, en paz, realmente extrañabas la ciudad luego de años sin estar ahí, pero la situación lo ameritaba, no podías seguir ahí.

pero ahora que todo se encontraba mejor, o al menos más tranquilo, podías volver a tu adorada ciudad que tanto extrañabas, extrañando hasta el desagradable frío de la ciudad norteamericana que tanto solías odiar.

—¿en qué piensas, tarada? —la agente interrumpió tus pensamientos riendo, saliendo de la tienda donde se encontraba mientras cargaba a kiara entre sus brazos, sonreíste al ver a tu hija reír junto a tu amiga.

la gran razón porque abandonaste la ciudad.

jamás creíste que abandonarías tu ciudad natal por el hecho de querer ocultarte, ni el hecho de ser madre, pero al mirar cinco años atrás, sentías que había sido lo correcto. tu relación con el soldado no estaba bien, todo cada vez se complejizaba más por su situación con los vengadores, el hecho de estar embarazada hubiera sido la guinda del pastel para buck.

aunque querías que él te contuviera y ayudara en el proceso, y que lo amabas con locura, no podías hacerle eso, ni siquiera sabías como reaccionaría si le hubieras dicho que estabas esperando una hija de él.

ni siquiera sabías que hacer en una situación así.

pensaste miles de veces dar un paso al costado, pero algo dentro de ti sabía que no podía hacerlo, el miedo tal vez. luego de arduas peleas contigo misma, decidiste tener a tu hija, pero con la condición de que huirías, lejos, así el soldado jamás se enteraría de tu embarazo, ni de que la hija que portabas era suya. 

habías tomado la decisión sola, sin mencionar a la agente que te apoyó en todo el proceso sin cuestionarte, no te sentías en el derecho de exigirle ser un padre para tu hija.

ahora casi seis años después, tenías a una hija grande y fuerte, tu felicidad, tu pilar fundamental.

—nada nuevo, sólo extrañaba el frío de la ciudad —te encogiste de hombros con una media sonrisa, natasha resopló rodando los ojos, haciéndote reír.

—yo estoy harta del frío y de la ciudad, deberíamos estar en el caribe tomando sol y unos martinis —se quejó mientras caminaban, haciéndote reír por lo alto.

—te recuerdo que ahora tenemos una polizona —dijiste tomando a tu hija entre tus brazos, besando sus mejillas repetidas veces haciéndola reír mientras sus ojos azules como el hielo te veían.

iguales a los de su padre.

 —¿quién dijo que no la llevaríamos? —continuó su idea la pelirroja, haciéndote reír mientras negabas con la cabeza— kiara puede jugar en la arena mientras mami y yo tomamos sol ¿a qué si?

imagina, one shots | bucky barnesDonde viven las historias. Descúbrelo ahora