Un momento después los ánimos volvieron a calmarse. La elfa había accedido a comer junto a los demás en la mesa. Permanecía callada al igual que Yuri, pero el silencio era llenado por los otros tres que parecían haber entrado más en confianza. Allen sabía que, pasara lo que pasara, al final todo saldría bien de una u otra manera.
–Por cierto, deberías saber que estamos trabajando para el Príncipe Damian– le comentó KC antes de beber su gaseosa.
–¿Es en serio?.– preguntó Allen, incrédulo– debe ser una broma.
–Es más que real: visitamos la casa del cliente– contestó Jayden– y también nos tomó por sorpresa tenerlo frente a nosotros. Hasta donde tenemos entendido, buscamos a su tío.
–Ester y Ali no lo creerán cuando se los cuente. Trabajar para la familia real...– contestó con una enorme sonrisa– este día fue de muchos sentimientos encontrados. Ni siquiera sé cómo es que debo reaccionar ahora mismo...
–Olvídalo, hay que mantener todo esto lo más alejado posible de la prensa y del público general– aclaró el vaquero, en un intento inútil de bajarle esas ilusiones– los medios aún no saben que Hopkins desapareció de su casa.
–Y no tardarán en hacerlo: el del profesor no es el único caso en ese barrio y una cosa siempre lleva a otra– contestó la gótica– si aún tenemos suerte, podemos encontrar algo nuevo mañana.
–En realidad, yo conseguí una pista: se trata de un video corto del sótano de Hopkins– agregó Allen– lo vi luego de grabarlo y, al parecer, era una sala para archivos.
–Con lo asustada y paranoica que estaba la MIYO de Hopkins, tuviste suerte de no ser atrapado por la policía–dijo Jayden con algo de irritación– pero ya no importa. Debes mostrarlo: cualquier cosa nos sirve, por más corta que sea.
–Por supuesto–contestó un poco preocupado el chico de los ojos verdes– pero estaba muy oscuro para observar más allá de la luz que entraba por el tragaluz del jardín trasero..
Yuri había acabado de comer hace rato, pero escuchaba atenta esa plática. Cuando mencionó aquel detalle. Igual pensó que debía escuchar lo que dirían KC y Jayden; debido a su enojo momentos antes no logró escuchar alguna explicación de Allen acerca de ese dichoso video. Era eso, o de pronto Allen dejó de confiar en ella para decirle.
–Tenemos el resto de la noche y es 4 de julio. Nosotros también debemos tomar un descanso del trabajo– le mencionó KC con una pequeña sonrisa– fuiste de mucha ayuda hoy: veo que tienes iniciativa. Podría enseñarte algunas cosas más sobre la profesión-- ofreció antes de ver la hora en su celular– Quedan 10 minutos para el espectáculo de fuegos artificiales. ¿Nos acompañan?
–Pueden adelantarse, debo acabar algunas cosas– respondió Allen un tanto dudoso, mientras regresaba a su cuaderno de dibujos.
–¿Tendrás la nariz metida en ese cuaderno toda la noche?–agregó KC con una pequeña sonrisa–Ah, no importa, te esperaremos.
–Ya está a punto de empezar, KC– le contestó Jayden mientras apoyaba su cabeza en el hombro de su pareja.
–Está bien. ¿Vienes Gabrielle? Te ayudaremos a subir esos ánimos.
–Hmm... Sí, por supuesto... – respondió la elfa en un modo de hablar muy bajo y tímido.
–Puedes ir con ellos. Estarás a salvo– afirmó Allen de manera comprensiva y con su mano sobre la espalda de la chica, con la que le daría unas pequeñas palmaditas de ánimo.
Ella asintió con la cabeza sin agregar alguna palabra más, con cuidado se levantaría y caminaría a paso lento hacia la pareja. No irían tan lejos: solo a una zona de la azotea donde el cielo se veía más despejado. Allen y Yuri se quedarían solos por un momento, con el chico de los ojos verdes guardando ese cuaderno dentro de su mochila de viaje y dejándola cerrada sobre aquella mesa.
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Leyendas De Gaia 1: El Caballero Soñador
De TodoLibro 1 de Leyendas de Gaia: El Caballero Soñador Allen Park es un chico con el sueño de convertirse en un héroe, y parece que finalmente podrá avanzar al embarcarse en su primera misión cómo cazarrecompensas. Pero en el mundo lleno de magia, suspe...