𝐃í𝐚 𝟏𝟖: 𝐋𝐚𝐜𝐭𝐚𝐧𝐜𝐢𝐚

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OS escrito por: Venus_Barnes

Como se entiende, en éste OS se abarca el kink de lactancia, por lo que sí no te gustan ese tipo de fetiches evita leer. Y si te gusta, disfruta.

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Steve siempre creyó que los Alfa exageraban cuando decían lo difícil que era contener su apetito sexüal cuando a su lado tenían un Omega en cinta. Siempre se burló de sus amigos Alfa por decir que estaban volviéndose locos al notar los cambios en sus Omegas, siempre hizo chiste de eso hasta ahora.

Hacía 14 meses Bucky le había anunciado sobre su embarazo, él felizmente ha estado a su lado, apoyándolo y haciendo todo para la comidad de su Omega y su cachorro. Sin embargo no esperaba que durante los primeros 8 meses, sus instintos y apetitos comenzaran a invadirlo de una manera poco controlable. Sobre todo, si era consciente de los cambios en su adorado Omega.

Esa cadera más ancha, ese rostro más vivo, ese precioso cabello, esa pancita que cada día se hacía más rendoda y voluminosa. Pero había algo que estaba enloqueciendo a Steve. Enloqueciendo de verdad.

Los pechos de Bucky.

Esos que conforme los meses pasaron se conviertieron en dos firmes montañas, repletas de leche que Steve adoraba masajear antes de dormir, todo era gloria hasta que Bucky llegó al octavo mes. Mismo en el que lo apartó de encima y le prohibió de manera tajante tocarlo más, decía que el bebé estaba demasiaso próximo y que se sentía agotado.

Pero Steve no le entendía, cada noche, se acostaba detrás de su Omega y con su firme mano acariciaba su abultado vientre con ternura, pretendiendo estar a punto de dormir, su mano se desviaba del precioso vientre, para colarse debajo de la camisa de pijama del castaño y detenerse sobre los pezones del dulce Omega, con los cuales jugueteaba, pellizacaba dulcemente y apretaba, tomaba el seno del Omega a voluntad y su erección crecía indetenible.

Al princio Bucky se quejaba, pero era minutos después que decidía dejarse llevar por los toqueteos de su Alfa, y terminaba con un masaje de pechos le daba la misma tranquilidad que da un orgasmo.

Aún ante la placentera situación llegó el último mes de embarazo, Bucky detuvo totalmente a Steve y se concentró en la llegada del parto, su Alfa estuvo inquieto ante su orden de no manoseos ni nada hasta que el bebé naciera, sin embargo no tuvo de otra más que obedecer y lo cumplió bien hasta que el pequeño cachorro nació.

Se cumplían dos meses y el cansancio de Bucky sólo incrementaba, su cuerpo había quedado muy magullado tras el parto y aunque tenía la ayuda al 100% de Steve no dejaba de sentirse agotado y agobiado. El bebé no les daba descanso y aunque Steve intentaba controlarse, se sentía desesperado de no poder hacer más por su Omega. Sobre todo se sentía desesperado de no tener tiempo para ellos dos, el bebé siempre lloraba en el momento que ellos empezaban a desestresarte y todo volvía al mismo ciclo de repetición.

Steve miraba a su Omega que yacía medio sentado sobre su enorme cama, no se había movido en toda la tarde desde que él regresó del trabajo y comenzaba a preguntarse qué tanto su bebé se alimentaba.

---¿Por qué me miras así?

Pregunta Bucky acomodando su pecho en la boca de su bebé.

---¿Qué?

---Me miras como si estuvieses molesto.

Steve bufó.

---No estoy molesto.

---Claro. Puedo notarlo ¿sabes?

---¿Por qué estaría molesto?

Dice serio y Bucky suspira mirándolo.

Fictober 2021: Stucky Donde viven las historias. Descúbrelo ahora