LA CARTA QUE YO ESCRIBÍ

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PARA CUALQUIER PERSONA


El alma rota como bellas estelas iluminadas ante la luz del sol y lo que es el mar, esa suavidad como los pétalos de una rosa anqué esta sea grande y sombría que no se digna a entender fuertes vientos y gigantes de negro siguiéndote a diario alejando a las personas, voces solitarias que viene y se van cosas sin insignificancia.

Como un número de teléfono perdido, un barquito plateado, un zorro naranja o tal vez un arete, cada uno diferente, pero sin esperanza una historia que se tiene que contar  la que muere al final.


Sin embargo llega el momento en el que la dejas de lado y comienzas a pensar.

Ese pensamiento se convierte en una persona para hablar para ti mismo.

Te preguntas;
¿quien eres?, te alagas y defiendes a ti mismo frente al espejo, tal vez te guste ver el brillo de las estrellas en el cielo, lo bellas que son veo el cielo a diario solo para pensar en el.

me he llamado ladrón por la manera en la que llegue aquí, por la manera en la que lloro por mi pasado, destruyendo mi presente y sin ver mi futuro.


1-2-3


Simples números, números que  me persiguen  ante el detalle de un reloj Clag – Clog , solo lo escucho en mi cabeza, mientras ando en bicicleta por las calles  Clag – clog un minuto detallado en 60 segundos mientras solo los veo pasar.

Solo me persiguen lenta- rápido por días, semanas, meses al igual que ambos me destruye no se detiene jamás, solo para deleitarme en tiempo pasado, tropezar en tiempo presente junto con mi sombra.

Mi mente se convierte en un lienzo los colores, son elegidos por el tiempo, dibujados por la humanidad, sobre puestos por mis decisiones estás también me afectan, me afectan como pequeños pasos al vacío.

Soy lo que los demás quieren que sea y dejo a lado mi propia felicidad.

COSAS INSIGNIFICANTESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora