23. Significa que estás en problemas, amigo

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No puedo separar la mirada del rostro de Olivia mientras ella se mantiene con los ojos cerrados apreciando la canción que sale de uno de los auriculares que le he prestado

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No puedo separar la mirada del rostro de Olivia mientras ella se mantiene con los ojos cerrados apreciando la canción que sale de uno de los auriculares que le he prestado. La letra se reproduce también en mi oído pero no me concentro tanto en ella como la manera que la rubia disfruta de la melodía.

Cuando escuché "Treat you better" de Shawn Mendes por primera vez siempre creí que el tema de ser dañado por una persona que amas podría provenir solo de tu pareja. Luego del viaje hacia las tierras de Olivia, la volví a escuchar en una radio mientras comíamos pizza y rápidamente el rostro de mi rubia vino a mi mente. No solo comprendí que las parejas podían lastimarte, sino también las personas que considerabas como tu familia.

Debido a la situación que tuvo hace unas semanas con su padre, la rubia ha estado sintiéndose un poco decaída y sin ánimos desde entonces. Pocas veces solía salir de su habitación y casi todas las noches dormía en mi cama para que le cantara una canción que la ayudara a conciliar el sueño. Le conté a mi abuela lo que había pasado a ver si ella podía hacer algo, y aunque el tema de jardinería no me convencía mucho, pude notar que el hobby ayudaba a Olivia a distraerse.

Mi abuela salió a no sé dónde y dado que no quería que la pulga de cabello rubio se quedara sola en el departamento, la he traído a uno de los ensayos de la banda para animarla, aunque también para vigilarla. El pensar en que su obsesión al alcohol hiciera acto de aparición nuevamente después de verla tomar una botella de vodka cuando regresamos a Canberra era una opción que no quería tomar en cuenta.

«Solo quería salvarla de ella misma».

Nos mantenemos sentados en unos de los muebles del estudio con vista al exterior a través de la ventana y dejo que mantenga su rostro pegado al respaldar del sofá. Olivia aprieta una de mis manos al escuchar el coro y posiblemente la letra sea un poco descriptiva ante su situación. Ella ha pasado por todo tipo de falta de afecto.

Con esta canción espero que entienda que, a pesar de todo, ella merece que la traten como la persona risueña y divertida que tal vez en su niñez le prohibieron ser.

—Me gusta —murmura débilmente.

Noto que abre los ojos y le dedico una sonrisa tierna cuando diviso aquel brillo triste en sus pupilas. No está llorando pero sé que está intentando no hacerlo frente a mí y los chicos que también se encuentran cerca. Llevo mi mano a su cabello y lo acaricio. Me he dado cuenta que amo sentir lo sedoso entre mis dedos.

—Me sorprende que nunca la hayas escuchado.

—No es como que mi madre me dejara escuchar otra cosa que no sea música clásica —responde, y se endereza para devolverme el auricular— Una vez empecé con Twenty One Pilots, no busqué otras canciones que me ayudaran a sentir bien. Pero esta canción me gustó.

Un plan B, bastardo © [01] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora