POV: Rey
Después de aquel episodio desafortunado del casi beso, Rey y Ben intentaron acercarse pero ambos eran tan orgullosos y tímidos, que apenas pudieron entablar unas cuantas líneas sin dejar de desviar la mirada bastante nerviosos. Ben luchaba por lo que no debía sentir y Rey estaba igual teniendo que disimular delante de todos, ¿cómo le decía a la madre Kanata quien era Ben o a sus amigas, a Sabine? No tenía con quien desahogar su frustración. Acababa de hacer una revisión de rutina a un bebe de dos meses y estaba abstraída en sus cavilaciones pensando en el dueño de sus tormentos, cuando recibió la llamada de Rose. Ella y Kaydel tenían días de querer contactarla y ella las evitaba.
—Rey, cariño al fin me atiendes.
—Rose... perdona es que he estado con exceso de trabajo y entre la fundación benéfica y el hospital, termino bastante agotada al final del día. —Y la verdad no mentía, porque si terminaba cansada.
—Mmm... —contestó Rose al otro lado de la línea— a mí no me engañas, algo te está pasando y me lo quieres ocultar, Kay y yo no nos tragamos ese cuento —la increpó.
—Vale, vale si hay algo que necesito contarte pero quiero que sea en persona es... algo que todavía no entiendo. —Se rindió ante la insistencia de su amiga.
—Pues, dentro de tres días tengo que ir a Takodama, ahí me lo cuentas. Dime una cosa... ¿se trata de algún chico sexy?
— ¡Rose...! —como le decía que no estaba tan fuera de la realidad, pero que el causante de sus desvelos y delirios era nada más y nada menos que su amor de infancia, quien estaba vivito y coleando y por si fuera poco un hombre prohibido, un enviado de Dios... algo bastante complicado y estaba loca de amor por él.
— ¿Que?
—Mejor te explico todo cuando vengas acá —continuó sonrojada, daba gracias a que era una llamada y no la podía ver.
—De acuerdo esperaré... dentro de tres días me tienes allí. Te llevaré los chocolates que tanto te gustan y eso me recuerda... que, dentro de dos semanas estarás de cumpleaños —le recordó—. Te llevaré algo lindo.
—Rose, no es necesario —luego recordó que Ben cumplía años un día antes que ella.
—Claro que lo es, y ahora si me disculpas tengo que ir a ver los preparativos de mi boda... no lo olvides.
—Por supuesto Rose, no lo he olvidado y en esa boda si estaré —le aseguró.
—Perfecto, cuídate y nos vemos dentro de tres días.
Se despidió de Rose y seguidamente alguien llamó a su consultorio, era la Madre Kanata, a quien también tenía días evadiendo.
—Mi querida niña... —entró acomodándose en la silla frente a su escritorio.
—Madre un placer tenerla por aquí, ¿en qué puedo ayudarle?
Maz Kanata la observó por unos segundos y Rey a se puso nerviosa por el escrutinio de la pequeña mujer, quien era capaz de hacer hablar hasta a un presidiario.
—Mi niña... ¿por qué me has estado rehuyendo? —Soltó sin más— desde que apareció el Padre Solo, no vas a misa y no te confiesas.
Rey tuvo que disimular sus nervios con una tos que salió de su garganta.
—He estado muy ocupada Madre. —Mintió rehuyéndole la mirada.
—Ese no es ningún pretexto, tú no te perdías una misa y siempre te confesabas. Dime una cosa... ¿el Padre Solo, no te cae bien? He notado mucha tensión entre ambos.
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Aeternun ( El recuerdo de tu amor)
FanfictionContenido adulto ⚠️+🔞 Nota: los personajes no me pertenecen, es posible que existan algunos personajes de mi creación pero los demás pertenecen a Lucasfilm y Disney Portada:@IrmaBurton Idea original del subtitulo: @berthatadeo7 Les traigo mi mas g...