Capítulo 30

122 14 183
                                    


Quizás esta vida se termine dando cuenta que es ella solo un momento de esta historia. Porque este amor no tiene tiempo ni fronteras, porque este amor va más allá de mi existencia. Te voy a amar y me amarás, te amo sin principio ni final y es nuestro gran amor, mi ángel de la eternidad

Abel Pintos

-

-

-

Mención especial del Fic: Kylo Ren, El terror de los siete mares de @berthatadeo7 

-

-

-


Ben y Rey, iban de camino hacia el aeropuerto. Habían salido bastante temprano porque Ben necesitaba regresar al convento lo mas rápido posible, puesto que tenía muchas labores pendientes para ese día, aun así, no habia querido desaprovechar estar unas pocas horas junto a Rey mientras la llevaba a tomar su vuelo hacia New york.

—Ben... No debiste traerme hasta acá, nos arriesgamos demasiado. —Ella le estaba reclamando por enésima vez y el joven solamente habia sonreído cínicamente al mismo tiempo que se encogía de hombros y luego le respondía con serenidad:

—Para nada, ¿crees que me perdería unas horas contigo? No, cariño mío... mientras pueda robarle a la vida aunque sea unos pocos segundos a tu vera, lo haré encantado.

—Pero... pudieron seguirnos... que se yo...

—Nadie se dará cuenta —resopló por la nariz mientras negaba con la cabeza—, este auto es totalmente polarizado, no tienes de que preocuparte.

—Eres demasiado confiado... imagínate si alguien nos sigue hacia el aeropuerto.

—Relájate —extendió la mano para acariciarle cariñosamente el mentón—, ya casi llegamos. Iré directamente al hangar —le indicó— ya me comuniqué con el capitán.

—¿No me llevarás al hangar de mi familia?

—No, quiero que abordes el avión privado de la mia... porque realmente, tu eres mi familia —le besó una mano—, eres lo único que tengo en esta vida, Rey... y si puedo velar por ti, lo haré hasta el día en que muera.

—¡No te hagas el gracioso, Ben...! —Hizo un mohín y le propinó un leve manotazo— ¡No menciones la muerte, por todos los cielos!

—Perdona —hizo el gesto de cerrar la boca con un candado y provocó una sonrisa en ella.

—A veces pienso que has perdido un poco el juicio, Ben —respondió más animada.

—Por supuesto que lo he perdido... estoy loco de amor por ti... y lo gritaría si pudiera, bien lo sabes.

—Por eso te amo —ella le dedicó una dulce sonrisa.

—Ya llegamos —le mostró el portal de acceso, entonces un oficial lo recibió y él mostró sus credenciales. Una vez adentro el capitán lo estaba esperando.

—Vamos, Ben, ya es la hora. —Rey se disponía a salir del auto en ese momento.

—Espera —él le sujetó de la muñeca y se acercó a ella para darle un tierno beso en los labios—... te voy a extrañar, en sobremanera —le susurró mientras la besaba.

—Serán... dos días nada más, Ben.

—Dos días, en los que me volveré loco.

—Pero tenemos que acostumbrarnos, porque la otra semana se nos hará eterna.

Aeternun ( El recuerdo de tu amor)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora