—Otro día más que no mejoro—y ahí iba otra vez, otra, maldita, vez—nO, la raphouse esta vacía sin tu rostro, pa que la plata si tu ereh mi oro, pa que la fama si la vivo solo. iE.
—Pietro por favor—rogué con las manos metidas en mi abrigo
—Nanana, escucha la letra, escucha—pidió dando golpecitos con el índice a su oído—Rainy day, rum rum, salí a derrapar por la carretera, a ver si mi día finalmente llega.
—Genial, se volvió eno—solté sarcástica rodando los ojos, aunque el me ignoró y únicamente me tomó de las manos llamando mi atención
—Que me mate la vida o que me mate ella—y entonces enarqué una de mis cejas
—Te juro que no se que te fumaste pero me ofende que no me hayas dado—critiqué regresando mi mano al bolsillo
—No, le hace daño a la cría, rainy day, rum rum—y empezó otra vez—On my way solo tu tu, quiero escapar de tu magia, soy tu muñeco vudú.
—A la madre de tu cría le hace mal escucharte—solté, y pronto una sonrisa irónica salió de sus labios
—Tan mal no canto cariño, no puedes mentirme—indicó viéndome de reojo con las manos metidas en sus pantalones
—Claro si le llamas cantar a tus aullidos—bromeé arrebatándole una pequeña risa que pronto me contagio.
Era un lindo momento, hace un rato Pietro terminó encontrando la prueba que no quería que encontrara, sin embargo no se lo terminó tomando tan mal, al final pareció aceptarlo, quizá con un poco más de alegría que yo, y no tardó en decirle a Wanda y Visión, antojándoseles salir a comer algo para festejarlo, hace poco había parado de llover y ahora caminábamos sobre los charcos, con su brazo rodeándome por sobre los hombros, y yo por la espalda, tal vez solo por el frío o únicamente quería darle un poco de cariño
—Quiero que se llame Luna, Luna Maximoff—indicó de la nada
—¿Y si es niño?—cuestionarle los planes era mi pasión pero fuera de eso también era una posibilidad
—Será niña, yo lo se, yo la puse—recordó y yo solo cerré los ojos frunciendo el ceño con un poco de diversión
—Eso suena raro—destaque soltando una pequeña risa
—Pero es cierto... mira el lado positivo, estando fuera de las cosas de los super podemos... dedicarnos a cuidarle, se que no te agrada la idea de ser madre pero deberías darle una oportunidad—indicó tomando mis manos, buscando que le mirara a sus hermosos ojos azules, sin embargo yo no pude, no por mucho, busqué la escapatoria mirando al pavimento húmedo a nuestro lado, pero aún lograba sentir la presión de sus iris
—Es que es difícil... más cuando estoy cuidando de Spencer...—pero pronto me interrumpió
—Adam puede compartir la responsabilidad, vamos _______, formemos un futuro juntos—y no, la idea no me desagradaba pero tampoco me podía permitir dejar solo a mi hermano.
Pero fue entonces que la voz de Wanda llamándonos rompió el momento, ambos acudimos a ella con prisa y nos terminó señalando el televisor tras el vidrio de un local.
Noticias, New York bajo ataque y una especie de, cosa giratoria rara.
—¿Qué es eso?—preguntó ella, y realmente creo que los cuatro manteníamos aquella duda, ella llevó los dedos a su boca ante el terror y yo solo miré a Pietro, el cual me ofreció un asentimiento, como si me asegurara que todo estaría bien
—Es justo lo que me estaba advirtiendo la gema—respondió Visión, y si, la ahora pelirroja me había dicho antes de salir lo que le había ocurrido a Vis y su gema, pero ninguna de las dos logró entender que era y Pietro solo opinó con un "Es la notificación de actualización de software".
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Ocean Eyes »» Pietro Maximoff y Tu
Science FictionQue tan lejos puedes llegar? y que tan rápido puedes ir?